Una biografía novelada de la niña de Lourdes gana el Premio Sant Jordi

Vivir unos tiempos de falta de espiritualidad quizá explique que dos de los grandes premios literarios otorgados ayer en Reus en la 57ª edición de la Nit de Santa Llúcia, que organiza Òmnium Cultural, tengan el mundo religioso como eje temático o de reflexión. Así ocurre en el Sant Jordi de novela, que en su 48ª convocatoria recayó en Les senyoretes de Lourdes, donde el reconocido escritor Pep Coll (Pessonada, Lleida, 1949) noveliza la vida de Bernadette Soubirous, la niña de origen humilde que con sus 18 visiones de la Virgen creó la meca del peregrinaje del mundo católico: Lourdes. La obra finalista, L'hora quieta, de la periodista Maria Dolors Farrés (Vic, 1962), debutante en las letras, hace girar su intriga sobre el amor homosexual entre dos monjes del siglo XIV en Vic, en pleno cisma papal, y el debate entre la moral pública y la privada. En el ámbito más personal, algunos de la docena de relatos de La mar enfora, obra con la que el veterano Guillem Frontera (Ariany, Mallorca, 1945) ha obtenido el Mercè Rodoreda, se palpa la presencia asfixiante de una Iglesia que marcó la infancia (fue seminarista con los monjes franciscanos) y la Mallorca de Frontera, paraíso perdido que refleja en su "archipiélago de relatos" impelido por "la necesidad de empezar a hacer balance de la vida".

Martínez Inglés logra el Riba de poesía y Guillem Frontera, el Rodoreda de relatos

"Se han escrito hagiografías, pero quería dar el punto de vista de una niña para quien la visión fue una tortura hasta el último día de su vida: iban a su cama de moribunda a cortarle los cabellos para venderlos", apunta Coll, que se interesó por el tema porque ocurría en el Pirineo, escenario de buena parte de sus obras literarias, como la novela El salvatge dels Pirineus, premio Sant Joan 2005. "Lourdes es un tema molesto desde la laicidad, pero existe: van seis millones de personas cada año; a mí me interesaba porque es una historia que nace desde el pueblo, aunque luego el poder clerical se la queda y da una visión femenina de la religión, ante el poder y la mirada masculina de Roma", afirma Coll, que con esta novela obra el milagro de ganar los 60.000 euros del premio.

Una opresión laica, la de llevar tres años enclaustrado traduciendo los sonetos de Shakespeare, condujeron a Txema Martínez Inglés (Lleida, 1972) a hacer un dietario de medio centenar de poemas muy libres que, titulados L'arrel i la pluja, le han conducido al 49º Carles Riba de poesía.

La noche dio para 10 galardones más, como el Ferran Soldevila al estudio El mas i la vila a la Catalunya medieval, de Víctor Faríaz Zurita; el Folch i Torres infantil a Certificat C99+, de Lluís Hernández; el Ruyra juvenil a Créixer amb Poe, de Maria Pilar Gil, y el Joan Maragall a La política dels cristians, de Josep Lligades. Jordi Tardà y Alfred Rodríguez Picó, por sus programas en Catalunya Ràdio y BTV, obtuvieron los premios Òmnium de radio y televisión, mientras que el memorial Joan B. Cendrós de trabajos periodísticos sobre cultura catalana en el extranjero fue ex aequo para el francoalemán Canal Arte y el ensayista Joan Ramon Resina.

Ante casi un millar de comensales que llenaron el Palau de Congresos de Reus y escucharon poemas del reusense Gabriel Ferrater, tanto el president del Parlament, Ernest Benach, como el de Òmnium, Jordi Porta, lamentaron que la Generalitat valenciana impida la llegada de TV-3 a esa comunidad. Porta anunció que Barcelona acogerá la gala el año próximo y que la entidad creará, junto al FC Barcelona, un nuevo premio de narrativa juvenil, dotado con 4.000 euros y un desplazamiento gratuito a un partido de la Champions.