Los gallegos gastan tanto en alimentación como en vivienda

Casi un tercio del presupuesto de las familias españolas se esfuma en vivienda y gastos relacionados con su mantenimiento. No ocurre lo mismo en Galicia. El estudio sobre Consumo de los hogares y distribución de la renta en España (1973-2003), de la Fundación Caixa Galicia, revela que los gallegos pagan casi lo mismo en vivienda que en alimentación: un 23,6% y un 22,2%, respectivamente.

Durante las tres décadas que abarca el informe, el porcentaje destinado por los gallegos a alimentos y bebidas no alcohólicas descendió de forma acusada. Pasó del 39,8% de 1973 al 22,2%. Pero en contraste con el aumento espectacular de la porción destinada a sufragar la vivienda en el conjunto del Estado, donde se duplicó, en Galicia ese crecimiento fue moderado: un 10%, frente al 16,9% del total español. Así, si la vivienda de los gallegos se lleva el 23,6% del presupuesto familiar, en España la cifra se eleva al 31,9%.

La vivienda se lleva en Galicia el 23,6% de la renta frente al 31,9% estatal

El informe, con datos genéricos extrapolables a la actualidad, traza un perfil del hogar gallego actual que difiere del español en una peculiaridad: el mayor peso relativo de los hogares sustentados por mujeres. En España, este tipo de hogares supone el 22% del total; en Galicia, se acerca al 30%. Los responsables del estudio -Joaquín Aldás, Francisco J. Goerlich y Matilde Mas- lo atribuyen al envejecimiento de la población.

Este tipo de hogares presenta niveles de gasto inferiores a aquellos en que el sustentador principal es un hombre, circunstancia que los autores del informe relacionan con la abundancia de viudas y mayores de 65 años en ese segmento, y por lo tanto con ingresos menores a la media. No obstante, el estudio de Caixa Galicia observa una "ligera convergencia" de los niveles de gasto total entre los hogares mantenidos por hombres y los que dependen de mujeres, gracias a la progresiva incorporación de mujeres que viven solas, trabajan y poseen estudios medios superiores. En 1980, sólo el 5,8% de los hogares españoles estaban sustentados por mujeres con estudios universitarios. En 2003 el porcentaje alcanzó el 16,5%.

Otra de las características de los hogares gallegos es el crecimiento relevante del peso de los que están mantenidos por personas con estudios medios y superiores, aunque éstos sigan representando un porcentaje menor que en el resto de España. El tamaño medio de los hogares cae en Galicia, pero lo hace a un ritmo inferior que en todo el Estado, donde las familias de cinco o más miembros han pasado de representar alrededor de un tercio en 1973 a apenas un 10% en la actualidad.

En el conjunto del Estado, los hogares con una o dos personas han experimentado un significativo crecimiento en estas tres décadas, y alcanzan ya el 40% del total. Son los que más gastan por persona, dada la relevante cantidad de gastos fijos e independientes del tamaño del hogar, especialmente la vivienda El menor peso de las clases sociales medias y altas y el inferior gasto medio total de los hogares son otras de las características de las familias gallegas.

Además de analizar las pautas de consumo de las familias, el estudio se centra en su segunda parte en la distribución personal de la riqueza. La renta per cápita gallega se encuentra por debajo de la media nacional. El 5% de los gallegos más pobres combinó a lo largo de los últimos 30 años aumentos con disminuciones en el reparto de la renta, para terminar con una proporción ligeramente menor que en 1973. Este hecho, en un contexto nacional de ganancias claras de este segmento de la población, se traduce en una relación más desfavorable en Galicia que en el resto.

Como corresponde a una población de renta inferior a la media, los gallegos gastan menos que la media estatal. La brecha que separaba a los más pobres del ciudadano mediano se cerró, aunque sólo ligeramente, en las tres últimas décadas.