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Reportaje:

Cargill-Hojiblanca, unidos por el aceite

El objetivo de la 'joint venture' entre las dos firmas es exportar unos 60 millones de litros

La cooperativa andaluza Hojiblanca y la multinacional Cargill han unido sus fuerzas con la constitución de una joint venture al 50% para la comercialización de aceite de oliva en España y sobre todo en el exterior. El objetivo de ambas firmas es aumentar las ventas en unas 60.000 toneladas, lo que les situaría en el segundo grupo en el sector, por detrás de SOS-Carbonell. Para lograr este volumen de ventas, la nueva sociedad pretende operar fundamentalmente con marcas de la distribución, sin renunciar a la marca propia.

"Después de barajar diferentes posibilidades", señala el director general de Hojioblanca, Antonio Luque, "como productores y comercializadores de aceite, hemos considerado la opción de Cargill como la más interesante para cumplir nuestros objetivos de estar presentes en los mercados del todo el mundo al disponer de una importante red comercial".

La nueva sociedad se centrará en la venta de aceite con marca de la distribución y el grupo se convertirá en la segunda firma del sector

El grupo Cargill se halla en España operando en España desde los años sesenta, y cuenta en la actualidad con 17 plantas en diferentes sectores, como las oleaginosas, envasado de aceites o piensos. La multinacional aportará a la sociedad su red comercial en 66 países con 158.000 empleados y una facturación de 88.300 millones de euros.

A partir de este acuerdo, responsables y técnicos de ambas firmas analizarán la situación de los mercados para ver las posibilidades de incrementar la venta de aceite de oliva.

Estrategia agresiva

La cooperativa Hojiblanca es en la actualidad uno de los principales grupos aceiteros españoles y ocupa el primer lugar en el segmento cooperativo. En los últimos años ha desarrollado una agresiva estrategia de crecimiento y diversificación En el grupo Hojiblanca se hallan integradas medio centenar de cooperativas con cerca de 30.000 olivareros.

Consecuencia de su estrategia de crecimiento, la cooperativa malagueña alcanzó el pasado ejercicio una facturación de 336 millones de euros frente a los 215 del ejercicio anterior, donde las exportaciones supusieron 120 millones de euros. Hojiblanca ha sido una de las primeras cooperativas que puso en marcha la venta de aceites envasados frente a la política general del sector de comercializar graneles. En la actualidad es la empresa líder en el mercado interior en la venta de aceite virgen extra. Sobre una producción de unas 90.000 toneladas, el envasado supone entre 25.000 y 30.000 toneladas, de las que 17.000 corresponden a los aceites vírgenes. La exportación de graneles constituye aún un peso muy importante en su actividad.

Con la constitución de esta joint venture, con vistas a cubrir las posibles necesidades de ventas en los nuevos mercados el grupo se plantea la necesidad de realizar inversiones a corto y medio plazo para disponer de una mayor capacidad de envasado. Sin renunciar a su posición en el segmento del aceite virgen, el objetivo del grupo es operar sólo en el envasado. El eje de las ventas se pretende sea la marca de la distribución, tanto en aceite de oliva como en el aceite virgen.

Esta estrategia de cara al exterior se quiere desarrollar también en España con los principales grupos de distribución.

Trabajadores en una fábrica de Hojiblanca en Antequera.
Trabajadores en una fábrica de Hojiblanca en Antequera.JULIÁN ROJAS

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