Iniciativa quiere retrasar el retoque fiscal de Castells sobre las herencias

Iniciativa per Catalunya quiere frenar la rebaja del Impuesto de Sucesiones y Donaciones (a través de subir su mínimo exento)que el Gobierno catalán ha aprobado junto a la ley de presupuestos para 2008, aprovechando su tramitación parlamentaria.

Los ecosocialistas consideran que el Departamento de Economía, en manos del socialista Antoni Castells, no ha consultado las modificaciones fiscales con sus socios de Gobierno y defienden que éstas no deberían aplicarse hasta 2008, cuando está previsto que se aborde la reforma a fondo de este tributo.

Sin embargo, las modificaciones se han ido arrastrando desde 2004, cuando las prometió el Gobierno Maragall. Figuran en el programa del actual Gobierno de Entesa. Y el presidente José Montilla se comprometió a adecuar ese impuesto, incluso con un margen de generosidad superior para el contribuyente (mínimo exento a 600.000 euros para viviendas en sucesiones entre cónyuges y padres e hijos) que el aplicado en el presupuesto (500.000). En las donaciones, se ha simplificado la escala de 16 tramos a sólo tres y se reduce el tipo máximo del 32,9% al 9% y el mínimo del 7,42% al 5%.

El consejero de Interior y líder de Iniciativa, Joan Saura, expresó públicamente su malestar con Castells en la reunión del Consell Executiu, según han informado fuentes del Gobierno.

Comunidades como Madrid, Valencia, Baleares o La Rioja, gobernadas por el PP, prácticamente han eliminado el impuesto. También Castilla La Mancha (en 2008). Otras autonomías del PSOE pretenden rebajarlo, tanto por equidad como por la competencia fiscal interterritorial.

La competencia fiscal con Cataluña que plantean dichas comunidades es, precisamente, el argumento de Castells para haber dado un primer paso hacia la futura reforma "a fondo", que el consejero aplazó hasta el año próximo por "falta de tiempo". El consejero de Economía ha subrayado públicamente que "la competencia fiscal se empieza a notar" y "nos perjudica a nosotros y beneficia a los demás".

Con la presión encima de CiU y el PP, partidarios de suprimir el impuesto contra la voluntad de Castells, la Generalitat ha dado sólo un primer paso. Iniciativa negocia con Economía algunas modificaciones al texto enviado ya al Parlament, al considerar "excesiva" la rebaja. E incluso se plantea presentar enmiendas en la tramitación parlamentaria si Castells no atiende sus peticiones. ICV es consciente de la competencia fiscal y admite que debe haber alguna rebaja, pero previo acuerdo con los socios del Gobierno.