Uno de cada cuatro aspirantes a 'mosso d'esquadra' es mujer
Las agentes se integran en la escala básica de la policía, pero los puestos de mando siguen en manos de hombres
La feminización de los Mossos d'Esquadra es imparable. Al menos, de los agentes de base. Aunque los varones siguen dominando la cúpula policial -en un régimen de casi monopolio-, cada vez son más las mujeres dispuestas a lucir el uniforme azul. Un total de 1.281 aspirantes a mosso d'esquadra han comenzado estos días a recibir formación en el Instituto de Seguridad de Mollet del Vallès. De éstos, 331 (25,8%) son mujeres.
El porcentaje ha ido en aumento promoción tras promoción y sitúa a los Mossos como uno de los cuerpos policiales europeos con mayor presencia femenina. En contraste, los hombres forman una abrumadora mayoría (86%) entre quienes pretenden integrarse, el año próximo, en alguna de las policías locales de Cataluña.
Los Mossos cuentan con 13.022 efectivos patrullando en las calles, de los que 2.547 (19%) son mujeres. El panorama resulta menos halagüeño a medida que se avanza en la escala policial. O sea: a más poder, mayor es la presencia masculina.
Sólo dos intendentes
Las mujeres ocupan alrededor del 10% de los puestos de cabos y sargentos, pero sólo el 5% de los de máxima responsabilidad: subinspectores, inspectores e intendentes. De hecho, sólo hay dos mujeres con cargo de intendente, nombradas recientemente: Cristina Manresa y Rocío Rubio. Y los nueve comisarios del cuerpo -el sanctasanctórum de los Mossos- son varones.
A partir de las cero horas de hoy, la policía autonómica asume las competencias en materia de seguridad ciudadana en cuatro comarcas: Baix Llobregat, Garraf, Alt Penedès y Baix Penedès. Los 1.123 mossos que deberán garantizar la seguridad de casi 900.000 personas -el porcentaje de mujeres oscila "entre el 15% y el 20%", según un portavoz del cuerpo- trabajarán en 12 nuevas comisarías. Sólo una mujer, la inspectora Rosa Gubianas, estará al frente de una de las áreas básicas policiales, la del Garraf.
La Dirección General de Policía ha distribuido dípticos en las comarcas del sur de Barcelona para explicar dónde están las comisarías y cómo se debe presentar una denuncia. La publicidad institucional incluye ocho fotografías (dos por comarca) en la que aparecen agentes perfectamente uniformados -todos llevan la gorra puesta- que atienden, con una amabilidad exquisita, a los ciudadanos. "La proximidad es uno de nuestros activos más valiosos", recoge el anuncio. En las fotografías, la balanza se inclina tendencionsamente a favor de las mujeres: de los 12 agentes que aparecen retratados, sólo 4 -un irreal 33%- son varones.
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