La juez del 'caso Anesvad' decreta la libertad de Gamarra bajo fianza

La juez Belén Mendoza, que investiga la presunta apropiación de fondos por el ex presidente de la ONG Anesvad José Luis Gamarra, en prisión preventiva desde marzo, ha decretado su libertad provisional bajo fianza de 300.000 euros, con la prohibición de acercarse a la sede central de la entidad, en Bilbao, y comunicarse con sus empleados. Transcurridos más de siete meses desde su ingreso en la cárcel de Basauri, el Juzgado de Instrucción número 8 de Bilbao estima que el "peligro" de que pueda ocultar o destruir pruebas ha disminuido al estar Anesvad bajo administración judicial.

Respecto al riesgo de fuga, esgrimido por la juez en marzo para rechazar la primera petición de libertad provisional de Gamarra, el nuevo auto, dictado el pasado martes, señala que esa posibilidad "no ha desaparecido por completo", pero precisa que hay otras "medidas menos gravosas" que la permanencia en prisión para evitar que se sustraiga a la acción de la justicia, como la retención del pasaporte o la obligación de comparecer ante el juzgado. El acusado sigue siendo cónsul de Filipinas en Bilbao.

Existen "indicios abrumadores" de donaciones que no llegaron a la ONG

La juez acepta así parcialmente la tercera petición de libertad planteada este mismo mes por la defensa de Gamarra, acusado de apropiarse de 4,6 millones de euros, toda vez que rechaza el argumento de que esa cantidad se halla en las cuentas de la ONG, la undécima en España por fondos gestionados. La defensa resaltó que un informe del Banco de España concluye que Gamarra no se quedó de 3,4 millones. Ademas, ha aportado otra documentación que, en su opinión, justificaría que no se apropió de ninguna cantidad.

El auto destaca que existen "indicios abrumadores" de que no todas las donaciones recibidas por Anesvad "se encuentran en el patrimonio" de la entidad. La juez cita varios movimientos bancarios que suman algo más de un millón de euros y agrega que está pendiente de recibir los informes solicitados a Francia y Suiza respecto a varias cuentas en estos países, sobre las que la defensa también ha presentado documentos. La afirmación de la defensa de que "todos los fondos de Anesvad se encuentran en el patrimonio de ésta es, sencillamente, sorprendente", dice Mendoza.

La juez prohíbe a Gamarra acercarse a los locales de Anesvad en Bilbao y comunicarse "por cualquier medio" con sus trabajadores porque no ha desaparecido del todo el riesgo de que destruya pruebas, aunque haya quedado atemperado tras dictarse la administración judicial de la entidad. "Quedan pendientes de practicar numerosas declaraciones testificales, de tal modo que la no adopción de esta medida implicaría la posibilidad de que el imputado influyera sobre los testigos", añade el auto.

Mendoza fija la fianza en 300.000 euros debido al "nivel de vida muy elevado" del acusado, quien en la única declaración judicial que ha prestado aseguró que se sustenta "mensualmente de herencias e inversiones inmobiliarias".

La defensa de Gamarra está gestionando la presentación de la fianza, una tarea complicada al tener el ex presidente de Anesvad embargadas sus cuentas y el piso de su propiedad. Sus letrados han recurrido la "elevada fianza" impuesta y las medidas de alejamiento y prohibición de comunicarse con los trabajadores de la ONG. Alegan que el Consulado de Filipinas en Bilbao se halla justo al lado de la sede de Anesvad y que varios empleados de la ONG son las únicas amistades de Gamarra.