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Camps discute en público con Salgado por la falta de financiación autonómica

La ministra insta al presidente de la Generalitat a dejar el discurso de la discriminación

El presidente de la Generalitat, Francisco Camps, y la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, utilizaron ayer la Conferencia de Ministros Europeos de Administraciones Públicas que se celebra en Valencia para mostrar públicamente su enfrentamiento con el Gobierno. Camps aprovechó los pasillos del Palacio de Congresos de Valencia para quejarse a la ministra Elena Salgado de la falta de financiación autonómica y del dinero que reciben los catalanes. Salgado instó al jefe del Consell a abandonar el discurso de la discriminación. La escena tuvo lugar ante decenas de cámaras.

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Cualquier espacio es bueno para intentar poner en evidencia al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Francisco Camps y Rita Barberá aprovecharon ayer los resquicios que les ofreció su condición de anfitriones de la 15ª conferencia europea de responsables de Administraciones Públicas para mostrar su malestar con el Ejecutivo central.

La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, fue la primera en saltar a la arena. Al llegar su turno de palabra en el acto de inauguración, Barberá se levantó y afirmó: "Los gobiernos centrales no deberían legislar con nuestros presupuestos para no tener que ejercer, y consecuentemente financiar, competencias que no nos son propias en detrimento de las que sí lo son". "Y uno este punto de reivindicación con una reflexión que dejo sobre la mesa", prosiguió la alcaldesa, "vivimos un momento en el que las ciudades adquieren creciente protagonismo y afrontan nuevas realidades que, como el fenómeno migratorio, ponen de relieve graves carencias para hacer cumplir el principio de subsidiaridad, que mantiene plena vigencia".

Una vez metidos en arena, entró Camps, más comedido, que elogió el modelo de descentralización de España y sólo dio un pespunte: "Cualquier español tiene que tener las mismas oportunidades y el mismo trato y el mismo nivel de excelencia en los servicios básicos que se prestan".

Pero fue al acabar el acto inaugural con la intervención de la ministra de Administraciones Públicas, Elena Salgado, cuando el presidente de la Generalitat remató la faena. Aprovechó que Salgado, por cortesía, decidió acompañarlo a él y a Barberá a la salida entre una nube de cámaras y fotógrafos. En los pasillos, Camps se entretuvo y mostró su enfado, ante la sorpresa de la ministra, por la falta de financiación autonómica y la discriminación que, según el jefe del Consell, la Comunidad Valenciana sufre respecto a los catalanes. La titular de Administraciones Públicas aguantó con la sonrisa en la boca mientras respondía a las quejas de Camps. Con posterioridad, la ministra confirmó la conversación que ambos mantuvieron en los pasillos.

"Creo que no es razonable plantear el tema en términos de discriminación. La Comunidad Valenciana puede tener razones propias para la que la Ley Orgánica de Financiación de las Comunidades Autónomas (LOFCA) se modifique", continuó la ministra, "y algunas razones son compartidas por el Gobierno, como el incremento de la población, que justifica la modificación del sistema de financiación".

Salgado indicó que, con el objetivo de modificar el sistema de financiación, se han creado grupos de trabajo y se está trabajando en el Consejo de Política Fiscal y Financiera, aunque la disolución de las Cámaras impedirá aprobar un nuevo modelo antes de las elecciones generales.

La titular de Administraciones Públicas indicó además que "Camps reconoce que la inversión en la Comunidad Valenciana del Gobierno socialista supera, y con mucho, la realizada durante los años de Gobierno del PP".

La manifestación de la ministra fue negada horas después por Presidencia de la Generalitat. Y poco después, el vicepresidente del Consell, Vicente Rambla, adaptaba las declaraciones de Salgado al argumentario popular para asegurar que el Grupo Socialista en las Cortes Valencianas "no tiene ninguna excusa para no apoyar cualquier reforma legislativa que, como el caso de la LOFCA, permita que se reconozca la realidad de la población de la Comunidad Valenciana".

Barberá, Salgado y Camps, ayer, en los pasillos del Palau de Congressos de Valencia.
Barberá, Salgado y Camps, ayer, en los pasillos del Palau de Congressos de Valencia.JOSÉ JORDÁN

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