La Xunta inicia los trámites para crear el colegio oficial de detectives privados
Las 27 empresas del sector en Galicia piden penas de prisión contra el intrusismo
El Consello de la Xunta aprobó ayer el proyecto de ley que dará paso a la creación de un colegio profesional de detectives privados en Galicia. Esta reglamentación es una demanda de la Asociación Galega de de Detectives Privados, que pretende luchar contra el intrusismo creciente. El gallego sería, así, el quinto colegio oficial de este gremio en España, una profesión para la que, además, ya existe una diplomatura universitaria en Vigo.
La Asociación Profesional de Detectives Privados (APDP), que agrupa a espías de todas las comunidades, contabiliza en Galicia 27 agencias del sector, aunque, en realidad, no se puede saber cuántas más ofrecen servicios de vigilancia para particulares porque "hay muchísimo intrusismo". La localidad con más empresas que cuentan con licencia del Ministerio del Interior es A Coruña, pero Vigo, la ciudad que más demanda estos servicios de espionaje, le sigue muy de cerca y convierte a Pontevedra en la provincia con más profesionales.
Una vez que se apruebe la ley autonómica, los profesionales deberán ponerlo en marcha en el plazo de un año. En él, según el anteproyecto, podrán integrarse "las personas que posean el diploma de detective privado y las que, transitoriamente, no tengan ese título pero estén habilitadas por Interior para el ejercicio de estas funciones". La colegiación será requisito para ejercer la profesión en Galicia.
Según Julio Gutiérrez, presidente de la APDP, en España sólo tres autonomías cuentan con colegio oficial de detectives privados: "Cataluña, desde el año 2000; Valencia, desde 2003; y Murcia desde 2004". Madrid y Galicia se encuentran en la misma fase. En la primera de estas dos comunidades se aprobó el anteproyecto en enero y se espera que la ley entre en vigor este año. Esta ventaja en los trámites hace prever que el colegio madrileño nacerá antes que el gallego.
La profesión, desde el 1982, se aprendía en centros privados del país autorizados por el Gobierno central. Además, existían diplomaturas en varias universidades de fuera de la comunidad, o se podía optar por estudiar tres años de Criminología y realizar, después, un curso de detective privado para lograr la homologación. En respuesta a la demanda, desde hace tres temporadas, existe en la Universidad de Vigo el título de graduado en Ciencias Policiais e Detective Privado.
Gutiérrez destaca que uno de los propósitos de las leyes que se están aprobando es combatir el intrusismo "por la vía penal". Hasta ahora "todas las sanciones eran administrativas, y el intruso sabía que pagaba y listo". Pero hay un precedente en Canarias que los detectives toman como ejemplo: "El intruso fue condenado a un año de prisión".
Un portavoz la agencia Indetec asegura que el sector está "desbordado". La demanda se ha disparado en casos de "violencia doméstica, infidelidades" y, sobre todo, "asuntos de empresa". "Vigo está casi como Marbella", dice, "hay una psicosis general por el miedo a las grabaciones, y por dinero que desaparece de la caja, y por empleados que trabajan para la competencia y venden información".
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