Berja recuerda a curas caídos en la Guerra

El PSOE del municipio almeriense de Berja ha exigido al Ayuntamiento la retirada de una placa que rinde homenaje a los sacerdotes "mártires" abatidos durante la Guerra Civil. La placa fue colocada en el cementerio el pasado 31 de mayo por iniciativa del Obispado de Almería y sufragada por el Consistorio, presidido por Antonio Torres (PP).

"El Obispado nos pidió hacer un reconocimiento a los sacerdotes asesinados en la Guerra Civil. Igual que si nos lo pide alguien del otro bando, siempre y cuando no se desprestigie a ninguna de las partes. Y no hay más", declaró ayer Torres.

En la placa de mármol puede leerse "Memoria martirial. Tierra regada con sangre de mártires" y el nombre de seis sacerdotes abatidos o enterrados en el cementerio, como los párrocos de Alcolea, Darrícal, Benínar, Sorvilan, Alcaudique y Fuente Victoria. La placa ensalza que todos ellos "entregaron sus vidas como ofrenda agradable al Señor".

Para el grupo socialista, la colocación de la placa "sin previa consulta" constituye un agravio para quienes también murieron en defensa de la libertad y la democracia. "No ocurriría nada si la placa estuviese en la puerta de la sede del PP, a fin de cuentas, sólo tiene que rendir cuentas a sus afiliados. Pero no es así: se ha colocado en el cementerio municipal", explicó el secretario general del PSOE de Berja, Serafín Robles.

El obispado de Almería aseguró que la colocación de placas "por la geografía martirial de Almería" se realiza desde hace varios años cada 31 de mayo. "Es algo religioso que no tiene nada que ver con lo político. No es una contienda de la Iglesia, que ya lloró sus muertos. Es algo puramente espiritual. Todas esas personas están en la causa de beatificación de más de 90 religiosos de Almería y de 27 seglares", informaron fuentes cercanas al obispo de Almería, Adolfo González Montes. Los socialistas de Béjar, que tildan de "intolerable" el acto, observan intereses partidistas en el homenaje: "No es lícito utilizar el cementerio para avivar viejas heridas de virgitanos que sufrieron, independientemente de cuáles fueran sus ideas políticas. El PSOE exige la inmediata retirada de esa placa".