Las amas de casa amenazan con montar el pollo

Amas de casa asociadas a Tyrius controlan desde principios de mes los precios de la leche, el pan, las galletas, el pan de molde, el pollo, los huevos, la ternera, el cerdo, la dorada, el yogur y los cereales en todo tipo de establecimientos comerciales, desde hornos y ultramarinos hasta supermercados y grandes superficies. Las inspecciones se prolongarán hasta diciembre. "Se trata de realizar un control para comprobar si las subidas de precios están justificadas o no", explicó ayer una portavoz de Tyrius.

La campaña responde a las alzas, ya detectadas, en productos como el pan y la leche que se atribuyen a la postre a una subida desmedida de los cereales. Tyrius desarrolla en la Comunidad Valenciana las tareas de supervisión impulsada en toda España por la Confederación de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios para medir el impacto real de las alzas de precios que han aireado responsables de varios sectores de la industria alimentaria y su impacto sobre la economía doméstica.

Hace un mes, el valenciano Federico Félix, presidente de la asociación interprofesional avícola Propollo, alertó sobre una inminente subida del precio del pollo de entre 18 y 20 céntimos por kilo, en torno al 11%, debido al notable alza del precio del pienso derivada, a su vez, de la subida del precio de cereales como la cebada, el trigo o el maíz. El kilo de cebada, por ejemplo, se vendía el año pasado a un precio en torno a los 12 céntimos de euro. Ahora se vende a 24 céntimos el kilo. Los cereales son la base de los piensos que representan en torno al 70% de los costes de producción de la industria avícola o ganadera.

Tyrius considera que las palabras de Félix "pueden suponer" una forma de recomendación colectiva o impulso de una práctica concertada que vulneraría la ley de defensa de la competencia y anuncia que ha presentado una denuncia al respecto ante el Tribunal de Defensa de la Competencia.

Félix celebró ayer que las amas de casa supervisen la evolución de los precios de los alimentos básicos pero lamentó que hayan decidido "matar al mensajero sin atender al fondo del mensaje". Porque al fondo está un alza desmedida del precio de los cereales que Félix, que también es vicepresidente de la interprofesional avícola europea, apuntó que afecta a toda Europa. "Hace unos años, los ciudadanos de las economías emergentes consumían cereal", explicó Félix, "ahora han prosperado lo suficiente como para consumir cereal y cereal transformado en huevos, pollo o carne". El consumo de nuevas granjas en países como China o India ha disparado la demanda a nivel mundial y los europeos son los más afectados por el problema. Por la misma razón, muchos agricultores españoles almacenan sus cosechas a la espera de que suban los precios. "Para una vez que les vienen bien dadas", bromea Félix.

El calibre del problema lo ilustran las protestas que anuncian los ganaderos vinculados a la Unió-COAG ante la subida del precio del pienso que estiman en el 30%. Unió-COAG solicita que se congele el abandono de superficies de cultivo que impulsa la Unión Europea o que se autorice el cultivo de cereales transgénicos para alimentar al ganado.