Mismos problemas, mismas recetas

Un lustro después de que la globalización pusiera de moda la palabra deslocalización en la economía valenciana, los sectores tradicionales siguen recibiendo las mismas recetas para ganar competitividad y se resisten a aplicar algunas de ellas. Y si bien es cierto, que la situación, por ejemplo del juguete y del calzado se ha estabilizado, ayer, en una de las mesas sectoriales del cuarto Congreso de Economía Valenciana, representantes de la universidad y la patronal dejaron claro que uno de los principales retos sigue siendo ganar dimensión, paso al que las empresas son en general reacias.

Un catedrático asegura que la innovación es la asignatura pendiente del calzado

La escasa presencia de público que acudió ayer por la tarde a la feria de Alicante (IFA) para escuchar el debate sobre sectores tradicionales parecía un reflejo de la falta de interés de las empresas en escuchar unas recetas que están sobre la mesa desde hace años. Ganar dimensión o aumentar la cooperación fueron los retos más repetidos por ser los que más reticencia crean entre las empresas de los sectores tradicionales.

El ejemplo más claro se centró en el juguete, un sector muy atomizado que en la Comunidad Valenciana cuenta con 203 empresas, de las cuales sólo dos son grandes, repasó José María Gómez, catedrático de la Universidad Miguel Hernández. La cifra total de negocios es prácticamente la misma que en 1999, recordó Gómez, quien insistió en que las empresas tendrán que recurrir a acuerdos de colaboración para distribuir sus productos. "El sector no se ha movido en esos ocho años, lo que supone que no ha habido una respuesta activa a la globalización", añadió el catedrático. Los datos que ofreció apuntalaron la idea: tres empresas facturan el 45% del sector y el 10% suma el 70%. Gómez insistió en que el tamaño, pero también la especialización, la cooperación y la internacionalización son factores con los que las firmas deben aumentar su competitividad. El catedrático recordó que la competencia es cada vez mayor en el juguete y, entre otras sugerencias, planteó la conveniencia de que las empresas exporten más y crezcan vía fusiones y adquisiciones "a las cuales el sector es reacio". También apostó por utilizar más las nuevas tecnologías, como la venta por Internet, la ampliación de mercados internacionales o la búsqueda de nuevos nichos de mercado.

El reto de ganar dimensión fue también defendido por José Antonio Pastor, presidente de la Asociación Española de Fabricantes de Juguetes (AEFJ). Pastor explicó que el 59% de la producción está deslocalizada, porcentaje que se eleva hasta el 82% en las empresas grandes. Destacó también que muchos de estos negocios superan los 50 años de vida y tras destacar que la globalización ha potenciado las estrategias de marca y precio, admitió que el "reto es ganar dimensión".

Por lo que respecta al calzado, el presidente de la Federación de Industriales de Calzado Español (FICE), Rafael Calvo, trasladó un mensaje optimista tras la buena evolución de las exportaciones el año pasado y durante el primer semestre de 2007 y la perspectiva de que se mantenga la tendencia. Preguntado por la competencia asiática, Calvo, en declaraciones a Efe, instó a los empresarios "a no tener miedo" y defendió que el sector tiene la posibilidad de "hacer un producto [en relación al calzado de alta gama] y apostar por unos activos que, de momento, no tiene la industria de China". En su intervención, defendió que hay empresas que han hecho frente a esta época de transformación reconvirtiéndose en importadores o deslocalizando. Calvo puso el acento en el esfuerzo del sector en su conjunto por hacer frente a la nueva situación y también mencionó la conveniencia de apostar por un producto de más valor añadido y de acercarse al consumidor, por ejemplo, con la apertura de tiendas.

Más duro se mostró Josep Antoni Ybarra, catedrático de la Universidad de Alicante, que consideró que el calzado ha pasado de ser "un sector con ilusión a un sector desilusionado". Ybarra aseguró, entre otras cuestiones, que la innovación "es la asignatura pendiente del calzado", lamentó que la falta de interés de las empresas por cooperar en temas concretos y pidió formación específica para los trabajadores.

Por otro lado, ayer el secretario de Economía del PSPV-PSOE, Enrique Villareal, criticó que el Consell organice un encuentro en el que se deberían analizar "en profundidad las necesidades" de la economía y las "soluciones" que deberían aplicarse mientras los Planes de Competitividad están "sin cumplir".