La deuda pública valenciana es la más alta respecto al PIB autonómico

La deuda pública valenciana volvió a crecer en el segundo trimestre del año pese a los buenos augurios efectuados hace pocos días por el vicepresidente económico del Consell, Gerardo Camps, y colocan a la Comunidad Valenciana como la segunda autonomía más endeudada de España, por detrás de Cataluña.

Si la pasada semana el consejero sacaba pecho por el superávit de 138 millones de euros con que cerró las cuentas autonómicas de 2006, ayer se conoció que en junio la Generalitat acumulaba 11.130 millones de euros de deuda autonómica, con un crecimiento cercano al 2% respecto del anterior trimestre y del 7,6% interanual, según los datos hechos públicos ayer por el Banco de España. La ratio de deuda con respecto al Producto Interior Bruto (PIB) valenciano fue en junio del 11,3%, con lo que la Generalitat continúa a la cabeza del conjunto de España.

La Consejería de Economía es más optimista con los datos y ayer, a través de una nota de prensa, destacó que la evolución de la deuda valenciana consigue los mejores registros de los últimos 10 años. Este departamento consideró una buena noticia que el crecimiento interanual de la deuda valenciana fuera menor que el de La Rioja, Castilla-La Mancha, Baleares o Cantabria.

Cinco comunidades lograron reducir su endeudamiento en doce meses, en especial el País Vasco, que lo recortó más de un 23%, seguida de Asturias (-6,3%), Galicia (-3,4%), Navarra (-3,1%) y Murcia (-1,3%).

Deuda sanitaria

El director general del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), Enrique Pérez Boada, aclaró que para los datos del segundo trimestre, la Intervención General del Estado ha revisado -al alza- la base utilizada para incluir los 135 millones de euros correspondientes a la deuda valenciana proveniente del modelo de gestión sanitaria. Las empresas públicas -no computan la deuda de las universidades- vieron crecer su deuda un 10,1% en los últimos doce meses y un 4,2% en el segundo trimestre de este año.

La socialista Cristina Moreno, portavoz de Economía en las Cortes, interpretó estas cifras como un "jarro de agua fría a la retórica financiera del PP". Para la diputada, las cifras de juno son "una pesada hipoteca a la que tendrán que hacer frente las siguientes generaciones de valencianos mientras el Consell sigue felicitándose por un superávit puntual y efímero".

A este respecto, Moreno aseguró que "ha tenido que ser el Banco de España el que nos ofrezca la realidad valenciana, la de los primeros seis meses de 2007, que puede ser preocupante para el futuro". "Ha pasado el momento electoral y el Consell debe empezar a gestionar y a iniciar proyectos que, por lógica, le obligarán a asumir una mayor carga de gastos y obligaciones", vaticinó la portavoz de Economía socialista.