El Gobierno turco estudia levantar la prohibición del velo en la nueva Constitución

Respaldado por la cómoda mayoría que logró en las elecciones parlamentarias turcas del pasado julio, el gobernante Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP, islamista moderado) ultima el borrador de la nueva Constitución, que entre otras reformas pretende levantar la prohibición del velo en universidades, escuelas y edificios públicos. Según el AKP, la futura Carta Magna cerrará la era militar en Turquía y ampliará las libertades individuales. Pero la oposición teme que el partido del primer ministro Recep Tayyip Erdogan empiece a minar las bases del laicismo tradicional.

La dirección del AKP, que tiene sus raíces en el movimiento islamista, analizaba ayer el borrador, preparado por legisladores del partido con la asesoría de un comité de académicos. El texto reemplazará a la Constitución de 1982, redactada por un comité cívico-militar dos años después de un golpe de Estado y que, según el viceprimer ministro, Cemil Çiçek, "no responde a las necesidades de la sociedad".

El objetivo, insiste el Gobierno, es ampliar las libertades individuales, una de las exigencias de la Unión Europea para la integración de Turquía. Entre otras reformas, el borrador prevé reducir los privilegios otorgados a funcionarios y militares, especialmente la inmunidad de la que gozan, y limitar las prerrogativas de la Corte de Constitucionalidad a la hora de ilegalizar partidos políticos.

La medida que despierta más recelos, sin embargo, es la derogación de la prohibición del uso del velo o del pañuelo en centros educativos públicos, uno de los pilares de la tradición secular turca. Se trata de una de las banderas enarboladas por el AKP, y cuenta con el respaldo mayoritario de sus votantes. Tanto la esposa del presidente, Abdulá Gül, como la de Erdogan desafían los usos convencionales al aparecer siempre con la cabeza cubierta. El primer ministro turco prefirió mandar a su hija a una universidad de Estados Unidos, donde podía llevar la cabeza cubierta.

Aún no se conocen los términos del borrador, que será presentado la próxima semana, pero ayer mismo los rectores universitarios, encabezados por Erdogan Teziç, presidente del Consejo de Educación Superior (YÖK, en sus siglas en turco), se reunían para preparar una respuesta. El nuevo texto constitucional que prepara el AKP pretende recortar, justamente, poderes al YÖK, legado del golpe militar de 1980.

El Gobierno, sin embargo, ha insistido en que no pretende redactar en solitario la nueva Carta Magna, y que está abierto a las contribuciones de todos los sectores sociales, "para sentar las bases de la reconciliación. "Ésta será la Constitución de Turquía, no la del AKP o de aquellos que nos votaron", reiteraba ayer Çiçek. La reforma constitucional fue el núcleo del programa electoral del AKP en las legislativas de julio, donde el partido logró un 47% de los votos.