López avisa al tripartito de que no va a poder gobernar sin contar con los ayuntamientos del PSE

Los socialistas vascos escenificaron ayer el poder municipal del que gozan, el mayor de su historia, en un acto público de inicio del nuevo mandato. Nunca antes el PSE había gobernado en dos capitales y sobre casi el 40% de la población vasca. Con estas credenciales, su secretario general, Patxi López, no está dispuesto a consentir que el tripartito ningunee a sus alcaldes. Por ello, advirtió al lehendakari y a los tres diputados generales del PNV de que no podrán gobernar sin contar con los consistorios socialistas.

López reunió a los 18 alcaldes y a los portavoces en las Juntas Generales de los tres territorios en un céntrico hotel de Vitoria para aleccionarles sobre el nuevo curso político y recordarles la importancia de sus iniciativas para ganar las elecciones generales de 2008. El líder del PSE pidió a sus alcaldes "propuestas novedosas" que ayuden a sus ciudadanos a vivir mejor, refuercen la cohesión social y sirvan para un reparto más justo de los recursos.

Honradez, austeridad, cuentas claras y bolsillos de cristal son las máximas por las que deben regirse los asyuntamientos para recuperar la confianza de la población y que su gestión sirva para catapultar la imagen de los socialistas.

Además de insuflar moral a los alcaldes, el acto destiló el aire de un aviso a navegantes al PNV de lo que se puede encontrar si se le ocurre dar la espalda a las ciudades dirigidas por los socialistas cuando el anuncio del lehendakari, Juan José Ibarretxe, de convocar una consulta popular sobre la autodeterminación ha enrarecido el ambiente político.

El líder socialista recordó de entrada que su partido gobierna en dos de las tres capitales y en siete de las diez localidades siguientes más pobladas de Euskadi. Con 18 alcaldes y gobernando sobre 830.000 habitantes (el 38,9% de la población vasca), los socialistas se aprestan a que su voz se escuche.

López apuntó a Eudel, la asociación que reúne a todos los municipios vascos, tradicionalmente presidida por el PNV, como una de las primeras instituciones donde deben empezar a notarse los cambios. "Eudel debe ser plural y colocarse al servicio de los ayuntamientos. Tiene que erigirse en el motor de la reforma institucional pendiente en Euskadi", enfatizó.

Ley Municipal

El máximo dirigente del PSE tiñó su intervención de un notable contenido municipalista, aunque, inevitablemente, también se refirió a la consulta defendida por Ibarretxe. "Sólo pretende [el lehendakari] trasladar a la ciudadanía la incapacidad de algunos para ponerse de acuerdo con quienes no les dan siempre la razón", se lamentó López.

En su opinión, resulta imprescindible trabajar para construir la Euskadi de la paz, las libertades, la ciudadanía, los derechos sociales, el diálogo político y los consensos básicos. Y enfatizó que nadie cuente con su partido para "levantar muros" si el nacionalismo propone iniciativas que dividan a los ciudadanos.

Una vez que dejó clara su postura sobre ese asunto, López entró a fondo en las cuestiones locales. Reclamó la elaboración y aprobación de una ley Municipal de Euskadi, defendió la presencia de los consistorios en el Consejo Vasco de Finanzas y abogó por un desarrollo del Estatuto de Gernika "hacia dentro" para transferir competencias desde el Gobierno y las tres diputaciones a los ayuntamientos.

El líder socialista sintetizó en seis postulados la guía de actuación de los primeros ediles: conseguir la paz desde la unidad democrática, fomentar la participación ciudadana, recuperar la confianza de la sociedad por medio de la aplicación de un código ético, una reforma institucional para dar a los ayuntamientos más poder y recursos, unos acuerdos que respeten la pluralidad y la lucha por "la Euskadi real". López recalcó este punto para recordar a sus alcaldes que lo que realmente preocupa a los ciudadanos son cuestiones como la educación, la sanidad, la vivienda o un reparto más justo de los recursos. "Ésa es la Euskadi real, lo que cuenta. El PSE está preparado para gobernar. Sólo hay que plantear unas propuestas novedosas para seguir avanzando", proclamó.

La sensación dominante entre los primeros ediles es que la alternativa de poder del PSE resulta hoy más posible que nunca, aunque se hayan truncado sus aspiraciones de encabezar las diputaciones de Guipúzcoa, donde ganó las elecciones el 27-M, y de Álava, donde quedó segundo.