Los médicos descartan que el bebé de Córdoba falleciera por sufrimiento fetal

José Eduardo Arjona, jefe del Servicio de Ginecología del Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba, sostuvo ayer que en el caso del bebé que falleció durante el parto el domingo pasado "posiblemente no existiera sufrimiento fetal", como se barajó en un principio.

Arjona se basa en los "datos clínicos" de los que disponen en el centro médico, aunque matiza que esta primera hipótesis sólo será válida cuando estén listos los análisis patológicos que se le están realizando al feto.

El caso se encuentra envuelto en un proceso judicial después de que los padres del bebé decidieran a principios de semana denunciar al centro médico. El Reina Sofía tiene abierta una investigación interna sobre el asunto y está colaborando con la justicia para tratar de esclarecer esta muerte.

La madre, Isabel Nievas, de 37 años, estuvo casi 48 horas ingresada antes de dar a luz. Estuvo motorizada pero, en la tarde del domingo, según la versión de la familia, ocurrió algo y se detectó que al bebé se le había parado el corazón. La mujer no había tenido complicaciones durante el embarazo, según la versión de la familia.

En un principio, se barajó la posibilidad de que la muerte se produjera por sufrimiento fetal agudo. Incluso, la presidenta de la asociación Defensor del Paciente, Carmen Flores, sostuvo ayer que en Andalucía, como en el resto de España, se está registrando "un aumento" de las muertes por sufrimiento fetal.

El próximo lunes Flores tiene previsto remitir un escrito a la Consejería de Salud de la Junta para que se abra una investigación sobre este tipo de fallecimientos que, en su opinión, se producen por una "mala asistencia en el parto".

Menos defunciones

Sin embargo, Arjona afirmó ayer que no hay "constancia de que se esté registrando un aumento de los casos de sufrimiento fetal" en los hospitales andaluces. De hecho, según los datos que maneja este especialista, lo que se observa es una "disminución importante" de las defunciones perinatales, es decir, las muertes que se producen desde que el feto pesa más de 500 gramos hasta que el bebé ha cumplido los 28 días de vida.

Pese a lo que comúnmente se cree, Arjona apuntó a que la mayoría de complicaciones provocadas por la patología de sufrimiento fetal no se registran durante el parto, sino antes, en concreto a los cinco o seis meses de gestación. Con la mortandad ocurre lo mismo. Según los datos que maneja Arjona, sólo un 5% de las defunciones perinatales suceden durante los partos.

En los últimos años se han "aumentado los controles en los fetos". Pero "no se ha conseguido reducir el sufrimiento fetal, lo que indica que se trata de una patología crónica", indica este especialista. La secuela más común de este tipo de enfermedad es la parálisis cerebral.