La ministra de Vivienda baraja ampliar las rebajas fiscales por alquilar pisos

Una década después de que el Gobierno de José María Aznar suprimiera las deducciones fiscales por alquiler, los socialistas se plantean reimplantarlas. La ministra de Vivienda, Carme Chacón, adelantó ayer que el plan de alquiler para jóvenes que pondrá en marcha en octubre contempla la revisión de estas deducciones. Fuentes del Ministerio especifican que se refieren tanto a las dirigidas a los propietarios, como a las destinadas a los inquilinos, que son las que "suprimió el PP".

Chacón comenzó ayer la ronda de contactos que va a mantener durante el mes de septiembre con distintos agentes sociales para consensuar las propuestas en las que se basará para impulsar el alquiler en la recta final de la legislatura.

Al terminar la reunión con el presidente de la Federación de Municipios y Provincias, Heliodoro Gallego, la ministra habló sobre el fin del boom del ladrillo. Aseguró que el precio de la vivienda crece ahora en torno a un 4% y un 5% (dato aún no oficial), por debajo de la tasa del 5,8% con la que cerró el primer semestre del año. Hay que remontarse a 1998 para encontrar un crecimiento anual de los precios en estos niveles. Según la ministra, el sector está viviendo "un ajuste suave".

La responsable de Vivienda también se pronunció sobre la crisis de las hipotecas de alto riesgo en EE UU. Según Chacón, los indicadores estadounidenses revelan "una economía que se para", situación que "no va a existir en España". Aseguró que aunque suban los tipos de interés, la economía española "crece a un nivel importantísimo". "Tenemos el paro más bajo de nuestra historia y lo más importante es que no se está destruyendo empleo ni se paraliza el consumo de las familias", concluyó.

El "ajuste" del que habla Chacón también lo notan los agentes inmobiliarios. La compañía barcelonesa Don Piso asegura que el plazo medio para comercializar una vivienda de segunda mano se ha incrementado casi un 40% en los dos últimos años. Don Piso estima en 120 el número de días de espera media para cerrar una operación frente a los 86 de 2005.