Lujo y buen comer camino a Sierra Nevada

Fruto de un sueño y de 40 años de trabajo de dos hermanos, el restaurante La Ruta del Veleta en Cenes de la Vega (Granada) se ha convertido en uno de los más populares de Andalucía, además de estar considerado como uno de los tres más lujosos de España. Su laureada cocina, que dirige José Pedraza (Huétor Vega, 1947), se encuentra en las más importantes guías gastronómicas del país. Además, durante los tres últimos años ha sido reconocido como el mejor establecimiento de restauración ubicado en el territorio nacional por el ministerio de Agricultura, Pesca y Restauración.

"Este lugar es un sueño que se ha hecho realidad a fuerza de dedicarle casi toda mi vida", comenta Pedraza, que comenzó a trabajar con 15 años en el restaurante Alcaicería de la capital, al que siguieron otras cocinas ilustres. En los años 60, Pedraza pasó por las cocinas de hoteles de lujo españoles y, después, se instaló durante 15 años en Ibiza como jefe de cocina. En 1976, junto a su hermano, decidió volver a Granada y montar un restaurante, La Ruta del Veleta, en una pequeña casita de Cenes de la Vega, con sólo 40 metros cuadrados y a unos 7 kilómetros de la capital.

"Se convirtió en el apeadero forzoso de todos los granadinos. Fuimos innovadores e introducimos en la ciudad la cocina de las otras regiones de España y de otros países, y se puso de moda. Si hoy están de moda las pizzas, entonces pusimos nosotros de moda las papas arrugadas", recuerda. Hoy, La Ruta del Veleta es un inmenso restaurante lleno de salones, comedores, bodegas, jardines y todo tipo de ostentaciones. Desde maderas talladas de Tailandia a mármoles de Pakistán, su decoración se asemeja a la de un antiguo palacio. "Cuido personalmente cada detalle. Ahora estoy liado con unos faroles nuevos que he encargado", explica.

Pese al éxito del negocio, que tiene en nómina a 30 trabajadores, José Pedraza se mantiene al pie del cañón sin descuidar un detalle. Un día cualquiera, llega al restaurante sobre las diez de la mañana para distribuir el trabajo entre el personal . Los jueves acude a Mercagranada para hacerse con la mercancía más importante, los alimentos "decisivos" para su cocina, como la carne y el pescado. A la una del mediodía come junto a sus trabajadores, porque sólo media hora después comienzan a llegar los clientes. Hasta las dos de la madrugada no concluirá la jornada de trabajo de este incansable currante.

"He visitado parte del planeta para dar a conocer nuestras creaciones. Por fortuna, la salud de la cocina española es muy buena. Incluso me atrevería a decir que somos la mejor del mundo y que sólo tenemos como rival a la francesa", concluye.