"Un mensajero del PP intentó comprarme con 160.000 euros y una vivienda protegida"

Sergio Krstic, número uno del partido independiente Jarama Directo (JaDi), de Paracuellos de Jarama (9.000 habitantes), ha denunciado ante el juez que un intermediario, que presuntamente actuaba en nombre del PP, trató de comprar su apoyo tras las elecciones a cambio de 160.000 euros y un piso de protección oficial. La denuncia la han puesto este partido, PSOE e IU. Se han aportado las grabaciones, a las que este periódico ha tenido acceso, y en las que es audible el intento de compra repetido. El PP y el presunto intermediario negaron ayer a EL PAÍS estas acusaciones.

"Puedo joder la vida al que me la intente jugar", amenazó el intermediario

"Esa cantidad se puede abonar en dos veces, una a mitad de año y lo otro a final... y si descuentas el 10%, que son unos 500, son unos 40, ¿vale?". El 10% es lo que el intermediario pretendía quedarse por el trabajo, y 40 son 40.000 euros al año durante cuatro legislaturas: el dinero que el mensajero ofrecía a Sergio Krstic si el día de constitución del Ayuntamiento votaba al PP. Además, en las grabaciones, a las que este periódico ha tenido acceso, también se escucha cómo el intermediario asegura a Krstic que no habrá ningún problema en que reciba una vivienda de protección oficial para un allegado.

Hacía días que el presunto intento de compra era un secreto a voces en el pueblo. Pero ayer, jornada de pleno en el Ayuntamiento de Paracuellos -desde el día 16 gobiernan los independientes AIPJ y el PP, en minoría-, la denuncia se hizo efectiva. Tras las pasadas elecciones, en Paracuellos del Jarama se creó una coyuntura política de difícil encaje. Los últimos ocho años había gobernado el PP apoyado por los independientes AIPJ. Pero esta vez ambas formaciones alcanzaban sólo seis de los 13 concejales que forman el ayuntamiento. El jueves 7 de junio, según consta en la denuncia de Krstic, J. M. M. S., un constructor del pueblo, se presentó en su casa. "Me dijo que yo era imprescindible para controlar el Ayuntamiento y me preguntó que qué quería", recuerda. Según este concejal, el mensajero le ofreció entonces una cantidad que no superara los 300.000 euros. Y ahí terminó la primera visita de la que no hay grabación porque, dice Krstic, le cogió "por sorpresa".

El sábado 9 de junio, vuelven a hablar, esta vez en un despacho del Ayuntamiento. Krstic lleva oculta una grabadora. "La cuestión es que hay una cantidad a determinar y me gustaría que me dijeras qué sería interesante para ti", le pide el mensajero. Krstic, que asegura que ya actuaba para ver hasta donde era capaz de llegar el otro, le exige garantías de que si vota a Fernando Zurita (PP), recibirá el dinero y "una vivienda protegida de las de Miramadrid" (una urbanización de Paracuellos) para un allegado. El mensajero responde que el dinero se le dará en cuatro años, pero que establezca una cantidad. Krstic pide que le doble del sueldo que percibiría como concejal liberado: unos 45.000 euros al año. El otro dice que volverá con una respuesta.

El 11 de junio, frente al domicilio de Krstic, el mensajero le ofrece la concejalía de Medio Ambiente y una tenencia de alcaldía. Luego le dice que respecto a una de sus peticiones (la de la vivienda) no hay problema si la persona cumple los requisitos, dando a entender que el concurso no será ningún obstáculo. En cuanto al dinero le dice: "No es fácil de conseguir. Pero el día 16 (ese día se constituía el Ayuntamiento) tenemos que estar ahí arriba y tener algo claro", se escucha en la grabación.

Ese mismo día, tras explicarle que el pago sería dos veces al año (cada uno 20.000 euros), el mensajero se pone nervioso ante la posibilidad de ser delatado: "En el momento en que me huela que puede haber una mala jugada, puedo joder la vida al que me la intente jugar", amenaza. Luego, más relajado, le aconseja como guardar el dinero del soborno: "Te regalo una caja de seguridad, cojonudas, 10.000 euros no ocupan nada. Y te digo otra cosa, en Hacienda no se preocupan con qué pagas la televisión, la comida...". La voz se despide advirtiendo de que en la operación hay "suplentes".

El día 14, Sergio Krstic rompe las negociaciones con el intermediario. Pero le pide garantías -se supone que fingiendo- de que si Fernando Zurita (PP) se enfada al no lograr la alcaldía, no dirá por ahí que fue Krstic quien pidió dinero a cambio de apoyo. El mensajero le dice que siempre podrá decir: "Fíjate que legal que soy, tú eres un cabrón que querías comprarme, pero no estoy en venta". Ahí se despiden.

El presunto intermediario aseguró ayer a este periódico que el asunto es una trampa que alguien le había tendido. Pero no quiso hacer más declaraciones. Fernando Zurita (PP) afirmó que la denuncia le parece absurda y que no sabe si conoce al presunto intermediario. "A lo mejor, conozco a mucha gente en el pueblo, pero ahora no me acuerdo". En relación a la parte del soborno referida a la vivienda protegida, insistió en que "nunca se ha amañado ningún sorteo, eso funciona por ordenador".