Ni en el mar ni en la tierra

El alcalde de Vejer, Antonio Jesús Verdú, del PSOE, siempre añade a su rechazo a los molinos previstos en el municipio que no está en contra de la energía eólica. "Sabemos que es una energía limpia beneficiosa para luchar contra el cambio climático". Siempre aclara que su rechazo no es a los aerogeneradores sino a su ubicación si ésta impide desarrollar el parque empresarial de Urdiales o los hoteles previstos en la zona de Mangueta. "Si se instalan en zonas alejadas del litoral y donde la afección no es gravosa para el ciudadano, se podrán dar las licencias correspondientes", explica el primer edil. También la plataforma Vejer Futuro suele hacer hincapié en que no está en contra de los molinos de viento sino en que el pueblo tenga que asumir el mayor peso de parques eólicos de la comarca sin garantías de que no haya perjuicios para el desarrollo turístico y económico.

Son las mismas argumentaciones realizadas en torno a la energía eólica marina. En el litoral de la Janda, frente a Conil, Vejer y Barbate, se proyectan también molinos en el mar. Tampoco son aceptados. Las explicaciones son las mismas que en tierra. "No se pueden poner si no hay consenso social", dice el alcalde. "Perjudican la visión desde la playa y, sobre todo, afecta a la pesca", mantiene el presidente de la plataforma, Alejandro Manzorro. El colectivo se ha reunido con asociaciones de vecinos, reparte carteles y convoca charlas informativas.

A pesar del rechazo los trámites siguen. La Delegación de Innovación tiene previsto seguir aprobando las declaraciones de utilidad publicas para el resto de parques eólicos pendientes. También el Boletín Oficial de la Provincia acaba de publicar el esquema sectorial de los recursos eólicos de Alcalá de los Gazules, el documento que establece el número y ubicación de los molinos en este municipio. Entre Medina y Paterna avanza la instalación de un parque. Mientras, el Gobierno central está a punto de publicar el decreto para regular la energía eólica marina.