Los vecinos de Valencia piden que se invierta en servicios antes que en eventos

Por encima de los eventos están los ciudadanos y la necesidad de cubrir las carencias de Valencia en servicios y equipamientos. La Federación de Asociaciones de Vecinos lanzó ayer este mensaje en la presentación de la XVII Setmana Ciutadana, que reivindicará una urbe "accesible" en su medio físico y a la cultura, la vivienda, la educación o la atención social. La presidenta vecinal, María José Broseta, pidió atención e inversión en el "día a día" de los barrios, y criticó que se dé prioridad a proyectos como el circuito de fórmula 1. La federación anunció también alegaciones a la ordenanza del ruido.

"Un circuito urbano en la tercera ciudad de España es muy fuerte", dice Broseta

El lema Per una ciutat accesible marcará la semana vecinal del 18 al 24 de junio. Los actos incluyen una mesa redonda sobre los problemas que plantea la ciudad a las personas con discapacidad y una exposición en la que todos los barrios aportarán fotografías que reflejan las carencias de su entorno urbano. El debate no se centrará sólo en las barreras físicas que dificultan la vida diaria de ciudadanos en silla de ruedas, de personas mayores o de padres con el carro de los niños, sino también "en la accesibilidad a la cultura, las nuevas tecnologías, los deportes..., a todos los ámbitos" que se traducen en "calidad de vida" y servicios próximos, señaló Broseta. La federación premiará, en esa línea, a la asociación de discapacitados Cocemfe, al equipo femenino de fútbol del Levante, a la Protectora de Animales y a la asociación de mujeres mastectomizadas Ammcova.

El secretario de la federación, Juan Cañizares, reiteró la exigencia de una "ciudad con servicios y una calidad de vida similar en todos los barrios", y subrayó: "No podemos tener eventos maravillosos y al mismo tiempo solares abandonados y con ratas". Toni Pla, vicepresidente de la organización, abundó en esta idea e insistió en que Valencia debería destacar primero por sus servicios sociales y otros equipamientos. "Y luego que vengan todos los eventos que quieran", añadió. A juicio de los dirigentes vecinales, las últimas elecciones indican que "a la gente le gustan los eventos" y que sitúa en un segundo plano "las carencias del día a día", por lo que es preciso buscar "un compromiso" que compatibilice los acontecimientos "sin olvidar los servicios de calidad y en cantidad suficiente", comentó Cañizares.

La ampliación de la mayoría absoluta del PP, que apuesta por esta política de eventos, no implicará que la federación cambie sus objetivos. "Ya nos replanteamos la realidad todos los días", explicó Broseta. Las asociaciones de vecinos insistirán en sus reivindicaciones ante las administraciones, especialmente el Ayuntamiento, y recordarán a los partidos políticos, en el gobierno o en la oposición, los compromisos adquiridos durante la campaña.

La federación también mantiene su rechazo al proyecto del circuito urbano de fórmula 1. "No digo que no sea importante, pero hay que valorar que por encima de los eventos están los ciudadanos", advirtió Broseta tras recordar que el circuito "condicionará la vida de muchas personas" y supone un gasto importante junto a los barrios marítimos, "necesitados" de inversiones básicas. La presidenta de la federación apostó por amortizar la infraestructura de Cheste, porque "un circuito urbano en la tercera ciudad de España es muy fuerte" y experiencias similares han demostrado "que hay más desventajas que ventajas". Broseta criticó, además, el nuevo gasto en la dársena del puerto para adaptarla al circuito tras la inversión para la Copa del América, detrás de cuyo escaparate "están El Cabanyal y la Malva-rosa". Además, las carreras acarrearán más contaminación acústica. Broseta anunció que la federación se opondrá, entre otros aspectos, al "bloqueo" o blindaje en las fiestas en la nueva ordenanza del ruido porque implica que no hay diálogo sobre el ruido y que la única vía serán de nuevo los tribunales.

Los vecinos, por otro lado, exigirán que las nuevas subestaciones eléctricas previstas por Iberdrola no se sitúen al lado de viviendas.