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El acuerdo tripartito tampoco se reeditará en el Ayuntamiento de Lleida

CiU vuelve al consistorio de Tortosa prometiendo defender el Ebro

El gobierno tripartito de izquierdas tampoco se repetirá en el Ayuntamiento de Lleida la próxima legislatura. El socialista Àngel Ros podría gobernar en solitario con la aritmética a su favor (tiene mayoría absoluta con 15 ediles) si Esquerra Republicana sigue los pasos de Iniciativa-Verds, que ayer rechazó seguir formar parte del gobierno. A la misma hora que los ecosocialistas daban calabazas a Ros, el candidato republicano y teniente de alcalde de cultura en funciones, Xavier Sàez, anunció que no será concejal esta legislatura tras su revés electoral.

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Con su decisión, Xavier Sàez sigue los pasos de Àngel Andreu, el candidato de ERC en Vic que también dimitió tras perder casi la mitad de los votos. Los republicanos perdieron en Lleida unos 3.700 sufragios y uno de los tres concejales que tuvieron en la anterior legislatura. Estos resultados, sumados al retroceso de Iniciativa ayudaron al PSC a conseguir la mayoría absoluta. Sáez intentó quitar trascendencia a su marcha. "No se abre ninguna crisis, se trata simplemente de un cambio de liderazgo en beneficio del partido", dijo. Tras la marcha de Xavier Sàez será Montse Vergés quien represente a los republicanos en el Ayuntamiento de Lleida.

Esquerra todavía no ha decidido si aceptará la oferta de Àngel Rosa para formar parte del gobierno municipal, ofrecimiento que incluye una tenencia de alcaldía. Quienes sí han decidido que no estarán en este gobierno son los ecosocialistas de Iniciativa. Su responsable local, Mercè Rivadulla, explicó ayer que su formación no puede aceptar la oferta de Ros: Una concejalía de Medio Ambiente con menos competencias que en la legislatura que toca a su fin.

Donde sí hay ya acuerdo es en Tortosa (Baix Ebre). Convergencia i Unió volverá al gobierno de la ciudad que perdió hace ocho años a manos del socialista Joan Sabaté. Los convergentes, que el 27-M se quedaron a un solo edil de la mayoría absoluta, sellaron ayer con ERC un pacto de gobierno de marcado perfil soberanista y en el que reivindican el papel "estratégico" de Tortosa como "nexo de unión de los Países Catalanes". El acuerdo firmado por CiU también incluye la cláusula de "defender" el río Ebro. En 2002 CiU apoyó el trasvase del Ebro del Gobierno del PP.

El candidato de CiU, Ferran Bel, será el próximo alcalde de la ciudad gracias a los votos de los dos ediles de ERC, encabezados por Ricard Forès. En lo institucional, ambos acordaron ayer seguir de cerca e impulsar definitivamente la definitiva creación de la veguería de las tierras del Ebro, mientras que en el ámbito local sobresale un pacto para tratar de regular la inmigración. Pasada ya la batalla contra el Plan Hidrológico, las elecciones del 27-M volvieron a situar a los nacionalistas al frente de las principales plazas de la zona, comenzando por Tortosa.

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