El patrón de Ferrol anuncia una huelga de hambre tras reingresar en prisión

El patrón mayor en funciones de la Cofradía de Ferrol, Bernardo Bastida, inició ayer una huelga de hambre, minutos después de que la juez que revisó su caso determinase su reingreso en la prisión provincial de Teixeiro, donde permanece desde el pasado miércoles imputado por el bloqueo de la ría cuando trataba de impedir la llegada de un buque a Reganosa. "Me considero un preso político perseguido por la Administración al servicio no del pueblo sino de otros intereses", manifestó el patrón mayor en un comunicado hecho público tras su declaración.

El Comité Cidadán de Emerxencia considera que con el reingreso en prisión de Bastida se quiere "descabezar" la protesta contra la planta de gas de Mugardos. La cofradía ferrolana celebrará hoy una asamblea para anunciar nuevas movilizaciones.

"El único delito que he cometido ha sido el de cumplir con mi papel de patrón mayor y respetar las decisiones tomadas en asamblea". En un escrito "de su puño y letra" leído por su abogado, minutos antes de regresar a la cárcel, Bastida denunció "que no se puede jugar con la libertad de una persona". "No he cometido ninguno de los delitos de los que se me acusa", manifestó, "no he matado ni a una ni a veinte personas, y no he vaciado las arcas de ningún municipio".

Casi siete horas de juicios, vistas y declaraciones en los juzgados no terminaron bien para el patrón ferrolano, en prisión provisional y sin fianza desde el pasado miércoles por su participación en el bloqueo de la ría hace ocho días, cuando un grupo de mariscadores trataba de impedir la llegada de un nuevo buque a Reganosa. La magistrada Elvira Méndez, que ayer revisó el expediente del caso, ratificó la prisión provisional para Bastida como medida preventiva "para impedir que el imputado pueda cometer nuevos hechos delictivos".

El auto judicial recuerda que el patrón ferrolano tiene "un importante número de causas pendientes en los juzgados de la ciudad" a los que se suman los delitos actuales de coacciones, amenazas, desórdenes públicos y desobediencia a la autoridad. La defensa de Bastida argumenta que "no hay fundamentos para una acción penal" contra el patrón y anunció que presentará un recurso de apelación. Su letrado, Víctor Manuel López, sostiene que la medida "es excesiva y nada habitual" y asegura que el propio auto "pone en duda" el delito de desórdenes públicos, el más grave de los cuatro que se le imputan.

Tras "agradecer de todo corazón" las muestras de apoyo recibidas, Bastida anunció que iniciará una huelga de hambre indefinida en señal de protesta "y no como presión". "No es una medida grata, pero por desgracia, no me dejan otra alternativa". Bastida también compareció como imputado en otro juicio por la ocupación del edificio de la Xunta en Ferrol, en febrero de 2003 por un conflicto con la Consellería de Pesca.