Portabella dice ahora que igual vota a Hereu y entra en el gobierno en meses

Votar a favor del nombramiento de Jordi Hereu como alcalde de Barcelona, abstenerse o proponerse a sí mismo. Quedarse en la oposición ahora pero incorporarse a medio mandato en el equipo de gobierno municipal. Todas esas posibilidades barajó ayer el republicano Jordi Portabella respecto a su futuro y su postura en el pleno de constitución del Ayuntamiento de Barcelona el próximo 16 de junio. Esa fecha fue la que puso ayer Hereu a Portabella para que se defina: "Habrá un antes y un después".

Públicamente ni socialistas ni sus socios de Iniciativa per Catalunya hacen ningún tipo de crítica sobre la actitud de Jordi Portabella. Ambas formaciones se han situado ya en el escenario de formar un bipartito, asumiendo que Portabella pasará al otro lado del salón de plenos, con CiU y el PP.

No quieren entrar en réplicas y contrarréplicas de las múltiples declaraciones del líder republicano. Ayer, en una entrevista en Catalunya Ràdio, Portabella no descartaba entrar en el gobierno de Barcelona más adelante, entrado el mandato, "si se produjera una evolución". Más tarde, el republicano comentó que de cara al pleno de constitución del Ayuntamiento se plantea tres posibilidades: que vote su propia candidatura, que vote en blanco o que respalde a Hereu. Esto último, apuntó, sería una forma de que "los socialistas empiecen el mandato con un poco más de estabilidad".

Preguntado sobre si barajaba la posibilidad de proseguir las conversaciones con Esquerra más allá del 16 de junio -el día que se constituye el nuevo plenario- Hereu vino a decir que no. El PSC, argumentó, no ha planteado un ahora o nunca a ERC para poder reeditar el tripartito pero, remarcó, "es evidente que el 16 de junio marcará un antes y un después". El alcalde en funciones no quiso valorar la posibilidad de que Esquerra pueda entrar en el equipo municipal a mitad del mandato: "No veo razón para que dejen de formar parte del gobierno ahora. Ellos han formado parte del mismo, han sido parte intrínseca de este equipo, de su modelo y de sus decisiones", recalcó. Hereu considera que Esquerra ha optado por un "cambio estratégico" y "una nueva lectura" de los resultados, de la coyuntura general y, además, la personal de Portabella.

En este sentido, los socialistas no creen que el súbito cambio de opinión de Portabella tenga nada que ver con el modelo de ciudad. De hecho, el propio líder republicano reconoció, en una entrevista en TV-3 el pasado jueves, que si hubiera conseguido cinco regidores no se hubiese planteado pasar a la oposición, por lo que el peso del "modelo de ciudad" parece relativo. La líder de ICV, Imma Mayol, se mostró respetuosa con la decisión de Portabella de pasar a la oposición. Sin embargo, recordó a ERC que "en política, como en la vida, las decisiones que se toman tienen consecuencias". La formación ecosocialista mantuvo una segunda reunión ayer con Carles Martí, segundo de Hereu, y se emplazaron para el próximo viernes ya con una propuesta más concreta sobre los ejes del próximo mandato. "Nosotros preferimos el tripartito, pero seguiremos trabajando para gobernar con los socialistas", añadió Mayol.

Giro nacionalista

El secretario general de ERC, Joan Puigcercós, reconoció ayer que la formación no alcanzó los resultados esperados en las elecciones del pasado domingo y aseguró que la dirección del partido ha tomado nota de lo que define como un "aviso del electorado", informa Eva Clota.

Puigcercós esgrimió tres razones para explicar las expectativas incompletas: la demanda de los votantes de un perfil más nacional, el desencanto por el proceso del Estatuto y las divisiones internas. Para superarlo, propone una "nueva hoja de ruta" que marque un giro nacionalista en el seno de Esquerra.

Un perfil que, según él, también tiene que llegar al Gobierno de Entesa y advirtió a sus socios de que "ERC marcará la agenda a partir de ahora". Puigcercós añadió que en el Gobierno catalán siempre ha primado "lo social por encima de lo nacional" y apuntó que ERC "no sabe distinguir entre social y nacional. La Cataluña social ha de tener un perfil nacional".