España formará y financiará a dos compañías del Ejército afgano para que protejan su provincia

El Ministerio de Defensa está negociando un MOU (Memorando de Entendimiento, en sus siglas en inglés) con las autoridades afganas por el que España se comprometerá a instruir, equipar y financiar al menos a dos compañías del Ejército afgano para desplegarlas en Badghis, la provincia cuya reconstrucción queda bajo responsabilidad española.

Este proyecto, de carácter bilateral, es independiente del envío de dos equipos con un total de 50 militares que se dedicarán a instruir a dos batallones del Ejército afgano, uno de guarnición y otro logístico, en una base próxima a Herat. Este último proyecto forma parte de un plan global de la OTAN y España no puede decidir dónde se desplegarán las unidades que instruya.

Con toda seguridad estos dos batallones no irán a Badghis, ya que la provincia donde se encuentra el equipo de reconstrucción (PRT) español no forma parte de las prioridades en materia de seguridad del Gobierno de Kabul ni de la OTAN. En otras palabras: si España quiere que haya militares afganos en su provincia tendrá que pagarlos. Y eso es lo que va a hacer.

Aunque aún no existe cálculo oficial sobre el coste del programa, siempre será mucho más económico que enviar tropas españolas. El año pasado, Defensa gastó 236,95 millones en el contingente en Afganistán, con un total de 690 militares.

El ministro de Defensa, José Antonio Alonso, adelantó ayer que su departamento estudia nuevas aportaciones en formación y material para el Ejército afgano, dentro de un proceso que definió como "afganización cada vez mayor" de la seguridad. El Gobierno español está convencido de que la presencia internacional en Afganistán fracasará si los afganos no van asumiendo mayores cotas de responsabilidad.

Para facilitar esta tarea, Alonso clausuró ayer, en el Centro Superior de Estudios de la Defensa Nacional (Ceseden), el curso de defensa para oficiales superiores que, entre el 7 y el 31 de mayo, han recibido 25 oficiales del Ejército afgano; entre ellos, seis generales, 17 coroneles y dos tenientes coroneles. El curso, que carece de precedentes, ha incluido conferencias y visitas a unidades e instalaciones de las Fuerzas Armadas españolas.