El PSOE afronta la búsqueda de candidatos para Madrid tras el desastre electoral
El PSM no reprocha a Zapatero la designación de Sebastián porque no tenía alternativa
"Tenemos un problema con Madrid". Esta es la frase talismán que se repite desde ayer en la dirección del PSOE en un intento de encapsular a esta comunidad respecto al resto de España. Pero el PSOE ha perdido las elecciones en número de votos porque uno de cada cinco sufragios obtenido por el PP procede del granero madrileño. Los dos últimos candidatos a la alcaldía los ha propuesto José Luis Rodríguez Zapatero. El PSOE desde ahora afronta la busca de candidatos.
El liderazgo incuestionable de José Luis Rodríguez Zapatero dentro de su partido va a facilitar mucho que el enorme disgusto que reina en las filas socialistas por la debacle de Madrid no provoque una guerra interna. Él llevó de la mano a Miguel Sebastián a la candidatura a la alcaldía de Madrid pero nadie se lo reprochará.
Respecto a las resultados en la Comunidad de Madrid, tampoco se prevé trifulca interna toda vez que el Partido Socialista de Madrid (PSM) eligió sin fisuras a Rafael Simancas como candidato a la presidencia del Gobierno regional. Por tanto, el partido no quiere reprochar nada a Zapatero y no puede hacerlo con Simancas porque ha sido su candidato. Hace cuatro años, Rodríguez Zapatero también decidió que la candidata a la alcaldía debía ser una persona de su absoluta confianza, Trinidad Jiménez. En eso caso, y posteriormente con Miguel Sebastián, no hubo voces en contra salvo la del ex presidente de la Comunidad de Madrid y ex secretario general de la FSM Joaquín Leguina.
Las cosas han ido a peor ya que el PSOE ha bajado posiciones en Madrid en los dos ámbitos, el municipal -en la capital- y el autonómico. Pero que no haya ruido de sables no quiere decir que no existan susurros sobre la mala elección del candidato. La designación, reconocen fuentes socialistas, llegó tarde y en medio de una gran confusión tras ofertas fallidas a personas relevantes del PSOE, entre ellas el ex ministro de Defensa José Bono. Éste aclaró que no estaba disponible, después de realizar unas declaraciones que fueron interpretadas en el sentido contrario. Muchos militantes vivieron ese episodio como un cierto desaire de Bono al partido, ya que incluso el Partido Socialista de Madrid había dado señales de darle la bienvenida como líder electoral para arrebatar la alcaldía al PP.
Pero se llegó a la campaña electoral y el episodio vivido con Alberto Ruiz Gallardón, que se mostró indignado de que Sebastián sacara a colación, en un debate televisado, su amistad con Monserrat Corulla, imputada en la Operación Malaya, ha resultado totalmente contraproducente para el candidato socialista, según dirigentes socialistas. Los datos que maneja la dirección del PSOE así lo confirman ya que el día después del incidente la candidatura de Sebastián descendió cuatro puntos en intención de voto respecto al barómetro de la jornada anterior.
Inútil fue que el candidato socialista y toda la organización se desgañitara en explicar que no pretendió en ningún caso hablar de temas personales sino preguntar al alcalde si había dado algún trato de favor a Corulla en sus negocios inmobiliarios en Madrid. Y tampoco amortiguó el efecto que el propio Zapatero saliera en defensa de Miguel Sebastián.
Implicación del presidente
Para suerte de la Ejecutiva Federal, dentro de la desgracia electoral, nadie en el Partido Socialista de Madrid puede acusar a Rodríguez Zapatero de haber cercenado o impedido la emergencia de candidaturas del propio partido madrileño para poner a su amigo Sebastián. Por tanto, la posibilidad de conflicto por ese lado no existe.
En la ejecutiva se asegura que Zapatero ha hecho todo lo que ha podido para buscar un buen candidato para la alcaldía de Madrid. Desde la primavera pasada se impuso hacer este trabajo y todo fue mal. A Zapatero le decían que no una y otra vez, mientras el PSM le pedía un candidato del máximo nivel. Pero ningún "mirlo blanco", como se decía en el PSOE, aceptaba. Hace cuatro años sí habría sido posible que alguna personalidad relevante, como Javier Solana, hubiera aceptado, pero Zapatero decidió que fuera Trinidad Jiménez. Ahora, con tiempo, empieza la búsqueda y cuando lleguen las siguientes elecciones, el PSOE llevará 22 años fuera del poder en Ayuntamiento y 16 en la comunidad.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma
Archivado En
- José Luis Rodríguez Zapatero
- Miguel Sebastián
- Elecciones Autonómicas 2007
- Rafael Simancas
- Elecciones Municipales 2007
- Elecciones municipales
- Resultados electorales
- Comunidades autónomas
- Ayuntamientos
- PSOE
- Madrid
- Elecciones autonómicas
- Administración local
- Administración autonómica
- Conflictos políticos
- Elecciones
- Comunidad de Madrid
- Partidos políticos
- España
- Administración pública
- Política