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CDC expulsa al alcalde que explicó cómo burlar la ley a los compradores de una finca

Convergència (CDC) expulsó ayer del partido al alcalde de Ginestar (Ribera d'Ebre), Josep Bru, que aparece en un vídeo grabado con cámara oculta mientras trataba de vender, en calidad de intermediario, una finca rústica a la vez que aconsejaba a los compradores el modo de sortear la normativa urbanística para poder construir una vivienda en aquel suelo agrícola, cosa que prohíbe le ley. Bru, alcalde desde hace 20 años, se negó ayer a renunciar a sus cargos como en primera instancia le solicitó el partido. Bru repite en las elecciones del sábado, pero como número dos. Esto supone que si CiU obtiene más de un concejal -hoy tiene cuatro de los siete del consistorio- Bru será edil nuevamente.

CDC pidió a Bru ayer por la mañana que renunciara a sus cargos, y también a tomar parte en las listas de CiU. De hecho, la dirección del partido le dio margen hasta las seis de la tarde para aceptar esta renuncia, algo a lo que Bru se negó porque, según dijo ayer "sería admitir que soy culpable y el vídeo está trucado". Por la tarde, el propio Artur Mas inició los trámites para dar de baja de la militancia al alcalde, según fuentes de Convergència. "En campaña hay blancos y negros, pero hay que saber distinguir también los grises y este caso es muy claro", dijo ayer el secretario de organización de CDC, Lluís Coromines.

Simulación

El motivo de esta medida es la grabación de un vídeo con cámara oculta de una conversación entre Bru y una pareja de detectives privados que se hacen pasar por compradores. La pareja simula ser un joven matrimonio, él catalán y ella irlandesa, interesado en adquirir una finca rústica en el pueblo para construirse una vivienda, práctica muy extendida en el sur de Cataluña y favorecida por inmobiliarias británicas, pero que es contraria a la normativa, que sólo posibilita la construcción de un almacén agrícola en estas parcelas. El alcalde se ofrece como intermediario de la finca en la que está interesada la pareja, y se ofrece para vendérsela por 45.000 euros, 3.000 menos que lo que les había solicitado una inmobiliaria. Bru dice tener una "opción de compra" sobre la finca. Después, y en esta misma conversación, grabada el 4 de enero en el despacho de la alcaldía, Bru aconseja a la pareja que presente un proyecto de reforma de la masía existente que sólo detalle "la carcasa, de estructura", no la distribución interior. Él mismo reconoce en la grabación que "con la ley en la mano no se puede dejar hacer esto [construir una vivienda]". Y añade: "Yo no me entero de lo que hagáis dentro". Bru negó ayer haber pronunciado estas palabras.

CDC tomó la decisión de expulsarle tras ver las imágenes. "Creemos en la presunción de inocencia. Ayer [por el lunes] le dábamos apoyo, pero hoy hemos tenido que reaccionar. Ojalá todos los partidos lo hicieran porque cosas así nos colocan a todos los alcaldes en el mismo sitio, y eso no es verdad", dijo ayer el dirigente de CiU en las tierras del Ebro, Xavier Pallarès.

La grabación es parte del trabajo de unos detectives privados contratados por un enemigo acérrimo del alcalde, el empresario local Gilbert Gil. Ambos mantienen un conflicto judicial antiguo desde que el alcalde le paralizó las obras de una casa para las que, según Bru, el empresario carecía de licencia.

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