El traslado de las ingenierías de la UPC al futuro campus del Besòs tardará cinco años

Un total de 5 años y 137 millones será el coste en tiempo y en dinero para completar el traslado al futuro campus del Besòs de las escuelas de ingeniería industrial de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC) situadas en Barcelona: en la avenida Diagonal, la ingenería superior, y en la Escuela Industrial de la calle de Urgell, en el caso de la técnica.

El rector de la UPC, Antoni Giró, defendió ayer el traslado de ambos centros al todavía nonato campus del Besòs. Giró explicó que, aunque ya ha sido aprobado por la junta de gobierno de la universidad, el traslado requiere que haya colaboración y ayudas públicas para llevarlo a cabo. Apuntó, a modo de ejemplo, un plazo aproximado de seis meses para comprobar si las administraciones se prestan a colaborar. La configuración del campus debería implicar a los ayuntamientos de Sant Adrià de Besòs y Barcelona, donde se ubicará, al Consejo Comarcal del Barcelonès y a la Generalitat. La UPC calcula que ganaría en el futuro campus Besòs al menos unos 70.000 metros cuadrados respecto a los actuales.

Protesta contra el traslado

Rehabilitar el actual edificio de la escuela de ingeniería de la Diagonal supondría un coste económico inicial ligeramente inferior. Pero, según el rector, esta ventaja inicial se esfuma por tres motivos: el plazo para adecuar totalmente las instalaciones, que se alargaría 14 años; la dificultad para lograr financiación para acometer la reforma, algo que en la práctica lo podría hacer más caro que el traslado al Besòs, y la ganancia de metros cuadrados disponibles, que sería de apenas 8.000 al final de las obras.

La oposición al traslado se ha dejado notar en la escuela de ingenieros de Diagonal. Según el profesor Lluís Pérez Vidal, miembro de la plataforma contra el traslado, éste "se quiere imponer en contra de nuestra voluntad". Para hoy está prevista una concentración frente a la escuela para protestar contra el traslado.

Giró acaba de cumplir su primer año como rector y ayer desgajó algunos logros de este periodo: la creación de una oficina para garantizar la igualdad de oportunidades; el impulso de comisiones para homologar títulos; la política de incremento de los estudios en lengua inglesa, que ha supuesto que haya 10 masters en esta lengua y la creación de un consejo para coordinar la investigación, entre otros.

En lo económico, la meta este año es salir de los números rojos frente a los 13 millones de déficit (pérdidas) con que se cerró 2006.