El tripartito y el PSE rechazan el emplazamiento de Batasuna sobre su presencia el 27-M
Los tres partidos que conforman el Gobierno vasco (PNV, EA y Ezker Batua) y el PSE-EE rechazaron ayer el último emplazamiento realizado por la ilegalizada Batasuna a las formaciones vascas para que expliquen qué van a hacer para posibilitar que los miembros del partido ilegalizado estén en las elecciones municipales y forales del 27 de mayo. Batasuna tiene previsto enviar a todos los partidos una misiva en los próximos días en relación con este tema, según anunció el sábado el dirigente de la izquierda abertzale Joseba Álvarez en un acto público. Pero antes de que la reciban sus destinatarios, los partidos ya hicieron público ayer su rechazo la planteamiento del partido independentista.
En un tono muy duro, el portavoz del PNV, Íñigo Urkullu, denunció el "victimismo" y la "actitud miserable y mezquina" de Batasuna por sus críticas a los peneuvistas, cuando "ya saben qué es lo que hemos hablando durante todos estos tiempos" en las reuniones privadas con ellos. El dirigente peneuvista indicó en un acto de precampaña en Güeñes (Vizcaya) que, ante la próxima cita electoral, o los líderes de Batasuna "toman las decisiones que tienen que tomar" o su situación futura quedará "con un cartel en el que los demás les digamos cierre por cese de negocio".
El secretario general del PSE-EE, Patxi López, pidió a Batasuna que no haga más requerimientos, porque parece "que es lo único que saben hacer". Y preguntó a los simpatizantes de la izquierda abertzale "qué han hecho ellos para tener la legitimidad democrática necesaria para hacer política, para estar en las instituciones y para presentarse a las elecciones". "Todo esto es incompatible con amparar o ampararse en la violencia", concluyó.
Vulneración de derechos
Por su parte, el dirigente de Eusko Alkartasuna Rafa Larreina advirtió a Batasuna que su partido "no admite emplazamientos" y le pidió a Batasuna que reflexione. Larreina recordó que el partido ilegalizado tiene y tendrá "la colaboración, el apoyo y el acompañamiento de EA" para pasar de la "estrategia de la violencia a la política democrática". El secretario de Organización de EA, que realizó estas declaraciones en un mitin en Alegría (Álava) en la presentación de la candidatura de esa formación para las próximas municipales, recordó que "a quien le queda por hacer lo que tiene que hacer es al mundo de Batasuna". Larreina dijo que se ha acabado el tiempo para quien "no sea capaz de reconocer la voluntad de la ciudadanía vasca y no sea capaz de reconocer y darse cuenta de que la mayoría rechaza cualquier vulneración de derechos humanos".
El otro socio en el Gobierno vasco, EB, aseguró, por boca de su líder Javier Madrazo, que Batasuna no sera "fiable" ni tendrá "credibilidad ni legitimidad" en el proceso de paz hasta que rompa "amarras" con la violencia.
