"La UE no es un buen administrador colonial"
Concluidos sin acuerdo entre Belgrado y Pristina 14 meses de negociaciones sobre el futuro de Kosovo, los albanokosovares se preparan para el veredicto del Consejo de Seguridad, que ven como la puerta a la independencia. Una independencia tutelada por un tiempo indefinido por una comunidad internacional encarnada en la Unión Europea, conforme a la idea de Martti Ahtisaari, el mediador de Naciones Unidas. Veton Surroi, de 45 años, encabezó la delegación albanokosovar en las conversaciones de Viena, última oportunidad de llegar a un acuerdo, y acepta ese control como uno de los precios a pagar por el premio mayor: la independencia.
"Kosovo es caso único por la intervención de la OTAN en 1999 y por ser protectorado"
Pregunta. ¿Por qué no fue posible llegar a un acuerdo entre serbios y albanokosovares?
Respuesta. Belgrado sigue anclado en el pasado y piensa en seguir dominando a Kosovo. Que Serbia dominara Kosovo fue el problema de partida.
P. Serbia les ofrecía lo que sería la autonomía más amplia de Europa.
R. Si no es independencia qué va a ser. Ya hemos probado dos modelos, el de dominación de Belgrado y el de protectorado internacional. Es imposible volver al modelo de dominación. Lo pagamos muy caro. Hizo falta una intervención de la OTAN para frenar un genocidio. Y el de protectorado es posible prolongarlo, pero todo seguirá igual: no va a crear progreso económico ni la responsabilidad que deben asumir los kosovares.
P. Rusia mantiene una cuidada ambigüedad con respecto a vetar el plan de Ahtisaari.
R. Nosotros queremos un futuro basado en los valores europeos. Si Rusia veta será por otras razones. Esperamos que esta propuesta de un nuevo Estado en Europa no sea vista como algo que va contra ningún país.
P. Moscú alega que la independencia de Kosovo amenaza con abrir una caja de Pandora secesionista, idea que también inquieta a otros países, como España.
R. El caso de Kosovo es único, por la intervención militar de la OTAN en 1999 y por ser protectorado de la ONU desde entonces. La independencia de Kosovo sólo sería un precedente en caso de acuerdo internacional en el sistema de Naciones Unidas. Es cierto que quien quiera y tenga fuerza para hacerlo puede usar no sólo Kosovo, sino el sueño de anoche, como precedente.
P. ¿Va Serbia a perder y los albanokosovares, a ganar?
R. En el momento en que termine la desintegración de Yugoslavia, todos vamos a ganar. Nosotros y Serbia somos ahora rehenes de la desintegración de la antigua Yugoslavia de Tito. Ese proceso debe terminar. El camino de la desintegración es paradójicamente el camino de la integración en la UE.
P. ¿Cómo ve usted la futura relación entre Kosovo y Serbia?
R. Son nuestros vecinos. A nosotros no nos convienen años y años de enfrentamiento. Tenemos que empezar a ver cómo podemos, desde el primer día de la independencia, estrechar la mano a Belgrado.
P. ¿Qué no gusta a Kosovo de la propuesta de Ahtisaari?
R. Nosotros tenemos un gran problema con la presencia civil internacional. En Kosovo va a haber una presencia de la UE sin precedentes. Y los antecedentes, como el de Bosnia, no son muy positivos. En la naturaleza de las administraciones que hemos visto en los Balcanes está dotarse de una gran potestad de restringir la capacidad y responsabilidad de las autoridades locales. Eso va en detrimento de la democracia. La UE no es buen administrador colonial de ese tipo.
P. Entre las objeciones que suscita un Kosovo independiente figura que se va a crear un agujero negro en un territorio que ya es el hogar de mafias y todos los tráficos ilegales...
R. El agujero negro se producirá si se mantiene la situación actual, en que la población no tiene responsabilidad sobre su territorio. Sobre los tráficos de drogas baste decir que para que el opio de Afganistán llegue a Kosovo debe cruzar por uno de los principales países de tránsito, Bulgaria, que es miembro de la UE desde el pasado 1 de enero. Toda la región, no sólo Kosovo, será un agujero negro si no tiene una perspectiva clara de integración en la UE.
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