Los árboles mueren serrados

La calle de Marmellà se halla en el distrito barcelonés de Sarrià y limita con el parque del Putxet. D. G., vecino que fue de la calle, se dirigió a este diario para denunciar una tala indiscriminada de árboles para construir un aparcamiento. La primera llamada al distrito para conocer los detalles produjo una respuesta inducida. El distrito ignoraba el número de árboles talados, pero consultada el área de Parques y Jardines, que depende de Imma Mayol, la respuesta era que la supuesta tala indiscriminada se limitaba a "tres pinos enfermos" y quizás algún yerbajo más. Total, nada de nada que mereciera las quejas del vecindario.

D. G. se quedó bastante perplejo cuando conoció esta respuesta. "Lo de tres árboles enfermos es antológico", dijo, para añadir que tenía fotografías de cómo estaba aquello antes, además de que podía comprobarse en las fotos aéreas de algunas páginas electrónicas.

Las fotografías enviadas a este diario muestran algunos árboles más en la zona, ninguno de ellos un pino. Hoy no están. Lo que hay es un enorme mordisco en la montaña y un montón de obras que un día serán un aparcamiento, un casal, una guardería y un gimnasio, según explica amablemente el director de servicios del distrito, Rafael Efeverri. "Es posible", explica, "que hayan sido talados algunos árboles. Al menos tres o cuatro corresponden al parque del Putxet, pero han sido convenientemente medidos y serán replantados en su momento", explicó. Parques y Jardines nunca ha dicho nada.

Tras la comprobación de que la fotografía sugería que allí había habido algo más que tres pinos enfermos (además de una cantera que también hubo) se volvió a preguntar a Parques y Jardines. Nuevo silencio. No es de extrañar. Este diario preguntó hace meses a ese departamento por seis árboles que faltan en la Gran Via barcelonesa, junto a Rambla de Cataluña. No ha habido respuesta adecuada. Hubo un conato de respuesta para explicar que habían sido suprimidos para construir el túnel del metro. El problema es que en esa zona no hay túnel de metro alguno. Después de eso, más silencio. O andan buscando los árboles o, tal vez, la Gran Via.

Para quejas dirigidas a esta sección se puede escribir a Catalunya@elpais.es a la atención de Francesc Arroyo.