Medio Ambiente no permitirá nuevas piscifactorías en zonas de la Red Natura

La Consellería de Medio Ambiente no permitirá que se ubiquen piscifactorías de nueva construcción en terrenos protegidos dentro de la Red Natura. El departamento autonómico, que participa en la elaboración del Plan Galego de Acuicultura que dirige la Consellería de Pesca, ha decidido aceptar que plantas ya construidas en terrenos protegidos puedan ser ampliadas. El incremento de la superficie de estas instalaciones, autorizadas en su día por el anterior Gobierno, obtendrá el visto bueno medioambiental siempre y cuando cumplan ciertos requisitos.

La Xunta se ha comprometido a que la redacción definitiva del Plan Galego de Acuicultura no proponga ninguna planta de nueva creación que invada espacios incluidos en la Red Natura, un listado de la Unión Europea que recoge parajes de especial valor ecológico. El primer borrador de este documento, que está siendo reelaborado por Pesca, plantea como zonas "aptas" para la acuicultura cuatro de estas áreas preservadas, además de varios hábitats prioritarios. Medio Ambiente garantiza que en el texto final, que se presentará antes de julio, no aparecerá ningún emplazamiento para granjas marinas de nueva construcción que afecte a enclaves protegidos.

Con las ampliaciones de plantas ya existentes no ocurrirá lo mismo. Fuentes de la Consellería de Medio Ambiente han explicado que se autorizará un incremento de la superficie de piscifactorías ya ubicadas en Red Natura. Estas obras se tendrán que ejecutar, eso sí, cumpliendo diversos requisitos para mitigar en lo posible el impacto en las zonas protegidas.

El primer borrador del plan acuícola del bipartito, con fecha de diciembre, propone seis ampliaciones de granjas marinas construidas en parajes de la Red Natura, una situación que se ha modificado para reducirla a dos casos, según informa Medio Ambiente. La Consellería de Pesca asegura que la propuesta para aumentar la superficie de la piscifactoría de Sera, en Porto do Son, ha sido reformada con el fin de que no invada áreas preservadas por la Unión Europea. Los cambios también prevén que los espacios definidos para levantar nuevas plantas en Xandriña (Camariñas), Seiruga (Malpica), Hoyo Longo y Corvo (Ribadeo) no afecten a estas zonas protegidas.

Uno de los proyectos que la Xunta ya ha empezado a tramitar es la ampliación de la granja que Stolt Sea Farm tiene en Quilmas (Carnota) y que, según reconoce el estudio de impacto ambiental, afecta en parte a zonas de la Red Natura, donde se ubicará la toma de agua, un grupo electrógeno, un almacén y un taller.

Detonante del cambio

La afección de las piscifactorías a la Red Natura fue el detonante de la modificación del plan acuícola redactado por el Gobierno del PP y aprobado cuando el equipo de Manuel Fraga estaba en funciones. El biapartito anunció en junio de 2006 que revisaría este documento y que suspendería su "eficacia" con respecto a las propuestas que afectasen a espacios protegidos. La Xunta retiró además del plan un proyecto de Pescanova para levantar una macropiscifactoría de rodaballo de 357.000 metros cuadrados en terrenos de la Red Natura de cabo Touriñán, en Muxía.

Desde entonces, y transcurridos nueve meses de aquella decisión, la Consellería de Pesca trabaja en la elaboración de la revisión del plan y, en colaboración con la Consellería de Medio Ambiente, busca fórmulas para evitar que estas instalaciones echen a perder parajes costeros de valor ecológico.

El plan propone enclaves en 336 hectáreas del litoral para ubicar posibles piscifactorías en los próximos años. Según los cálculos de Pesca, la construcción de estas granjas marinas supondrían una producción de 22.500 toneladas de peces al año y una inversión por parte de las empresas de más de 370 millones de euros. De este presupuesto, las arcas de la Administración autonómica aportarán la mitad. El estudio económico del plan asegura que las plantas propuestas crearían 1.700 empleos directos.