La inversión exterior en el sur del Mediterráneo ronda el 1%

El libanés Jean Jacques Sarraf, presidente de la Unión Mediterránea de Confederaciones Empresariales, ilustró con un dato la evidente distancia económica, empresarial y social entre las riberas norte y sur del Mediterráneo: la inversión extranjera en los países de la ribera Sur representa apenas el 1% de la inversión total, una cifra muy inferior a la que se registra en Latinoamérica, India o China.

Dos largos centenares de empresarios españoles, franceses y portugueses, por un lado, y marroquíes, argelinos, tunecinos, libios, egipcios, jordanos, libaneres, sirios y turcos, por otro, se congregaron ayer en Valencia en la primera de dos jornadas organizadas por el Centro Euromediterráneo de Cooperación Empresarial MedValencia, una entidad auspiciada por la CEOE y Cierval con apoyo de la Generalitat Valenciana.

El fomento de las relaciones entre empresarios es el primer objetivo del foro, pero también constituye una tribuna para reiterar los objetivos de integración regional en el Mediterráneo trazados en la Cumbre de Barcelona y, de otro lado, constatar el escaso avance registrados desde 1995.

El libanés Sarraf, presidente de turno de las patronales euromediterráneas, constató la "escasa" integración entre ambas riberas y recordó que el fomento de las relaciones privadas es "el primer paso fundamental para que la región euro-mediterránea pueda convertirse en un área de libre comercio en 2010", tal como estaba previsto por los impulsores de la integración.

Sarraf apuntó, además, los beneficios que obtendrían los países europeos al acercarse a sus vecinos: "La inversión en los países del sur del Mediterráneo se traduciría en menos inmigración ilegal y menos violencia, es el camino hacia la paz". Y, más adelante: "Europa debería ver a los países del sur del Mediterráneo, el mercado más cercano, como una oportunidad de afrontar los retos de la globalización, el sur del Mediterráneo es la solución para una Europa madura en términos de dinamismo y mano de obra".

Rafael Ferrando, en nombre de las patronales española y valenciana, destacó la importancia de la "cooperación empresarial" como vehículo para "impulsar la transferencia de tecnología" y, en paralelo, "incrementar la competitividad frente a otras regiones emergentes".

Francisco Camps, presidente de la Generalitat, subrayó la privilegiada posición de la Comunidad Valenciana como plataforma logística para conectar las riberas norte y sur del Mediterráneo.