Rajoy pide el voto a los defraudados con Zapatero y orgullosos de ser españoles

El PP tiene 680 propuestas para las elecciones autonómicas y municipales, pero en su presentación Mariano Rajoy dejó claro por dónde va a ir la campaña de este partido: la defensa de la unidad de España, contra viento y marea. Pero no sólo para su público fiel, sino para arrebatarle votos al PSOE. Rajoy, en un discurso propio de una campaña de las generales, pidió el voto a los que están "defraudados" por José Luis Rodríguez Zapatero y a la vez están "orgullosos" de ser españoles: "Hay que restablecer la unidad de todos los que perciben la idea de España como un sentimiento colectivo".

"Quiero que España sea vivida por quienes la gobiernan con orgullo. España es un sentimiento demasiado noble como para ser debilitado por iniciativas partidistas", sentenció Rajoy con tono grandilocuente. Un hombre no se pudo reprimir, y gritó un sonoro "¡Viva España!". El móvil de otro militante, con el himno nacional como melodía, se solapó con el discurso del líder.

La idea de la nación española, la única que reconoce el PP, recorrió todo el discurso de Rajoy en la presentación del programa de las autonómicas y municipales, en la madrileña Casa de Campo. "Sentimos España. No nos avergonzamos. Queremos lo mejor para España y vamos a luchar para conseguirlo. Nadie va a detenernos. Nadie va a impedirnos que digamos que nos gusta España. Que queremos que tenga la imagen que se merece por su historia, por su presente y por su futuro. Una gran nación que es de todos", insistió.

Este discurso, muy similar al que propone Nicolás Sarkozy en Francia, un personaje al que Rajoy admira y que tiene gran predicamento en la actual dirección del PP, se refuerza con el mensaje de la igualdad e incluso del progreso, conceptos que, según asegura Rajoy, ya no pertenecen a las "gastadas ideas de la izquierda". "Quiero la igualdad entre los españoles. Proponemos un catálogo de servicios públicos comunes para toda España y una cartera de servicios sanitarios comunes en todo el territorio nacional. España ha de ser una nación de ciudadanos libres iguales ante la ley", insistió.

La voluntad de Rajoy por contentar a las dos almas del PP, la centrista, concentrada en la gestión y alejada de la teoría conspirativa del 11-M, por ejemplo, y la derecha, jaleada por la cadena Cope, quedó en evidencia. Rajoy llamó a su partido a "ponerse las pilas" para recuperar los "años perdidos absurdamente" durante el Gobierno de Zapatero y hacer "propuestas en positivo y construir la alternativa", e insistió: "Somos el centro político de este país y este programa lo demuestra".

Pero a la vez aplaudió la manifestación del día anterior, preparada por la AVT, que había supuesto un problema para el PP porque fue convocada contra una decisión del Tribunal Supremo, la de reducir de 12 a tres años la condena al etarra Iñaki de Juana: "Podría hablar de la brillante manifestación de ayer en defensa de la decencia de España como país o de las victimas del terrorismo, pero estamos a otra cosa", se justificó.

El líder del PP sabe que su partido tiene que recuperar votos en el centro y arrebatárselos al PSOE, pero a la vez necesita que el ala más derechista de su electorado acuda en masa a las urnas, y por eso tiene siempre un exquisito cuidado para no enfadarlos. Rajoy, como José María Aznar hasta que dejó el Gobierno, evita pronunciar en público la palabra "derecha". Actúa como si eso no existiera en España, como si sólo hubiera "izquierda radical", representada por Zapatero, y centro, recogido en el PP.

"Quiero reivindicar el progreso y la vanguardia, pero no desde las gastadas ideas de la izquierda, sino desde el liberalismo, desde la alegría, el entusiasmo y la creatividad", dijo en otro momento. La voluntad de Rajoy por luchar con Zapatero en los terrenos teóricamente propios de la izquierda es evidente. "Quiero que el PP lidere el cambio que demanda España en torno al medio ambiente. Hay que luchar contra el cambio climático. Hay que demostrar que ser liberal y defender la iniciativa privada no es incompatible con defender el crecimiento en un entorno sostenible".