Paraísos fiscales para las ruedas

En Robledo de Chavela y Moralzarzal hay muchos más coches registrados que vecinos. Estos dos municipios forman parte del quinteto de localidades españolas que acaparan la matriculación del 22% del total de los coches de empresa de toda España, según el último informe de Automovilistas Europeos Asociados (AEA). El motivo: en ambas localidades el impuesto de circulación que hay que pagar por tener un coche es el mínimo que permite la ley.

En 2006, en Robledo, con una población de 3.319 habitantes fueron matriculados un total de 42.071 coches; y en Moralzarzal, con 10.604 residentes, se matricularon 35.295 vehículos. "A mí siempre me han dicho que en Moralzarzal hay cuatro coches por cada vecino. Yo ya te digo que eso es imposible, por lo que lo normal es que haya gente de fuera del pueblo que inscribe su vehículo aquí". Jorge Ignacio Montero, el dueño de la inmobiliaria que está frente al Ayuntamiento de esta localidad serrana no puede disimular una media sonrisa cuando se le pregunta si sabe que tiene la suerte de ser junto con sus vecinos los que menos pagan en la región por el impuesto de circulación. "A mí me parece fenomenal, al igual que al resto de vecinos", sentencia. Él tiene un todoterreno marca Hyundai por el que ha pagado sólo 17,98 euros de impuestos. El vehículo tiene 13,2 caballos fiscales, medida que depende de la potencia. Cualquier comparación que se haga con estas cifras resulta, cuando menos, ridículas. Por ejemplo, en Alcalá de Henares un Fiat Stilo con 12,95 caballos fiscales paga 110 euros.

En Robledo hay 13 coches por vecino. Tener uno cuesta siete veces menos que en Madrid

La ley permite a cada ayuntamiento fijar libremente su tarifa, dentro de unos márgenes. "Y así se han creado en algunos municipios verdaderos paraísos fiscales en relación con el pago de este impuesto municipal", explica el informe de la AEA.

"Si somos un paraíso fiscal en el impuesto de circulación también es justo decir que lo somos en el impuesto de bienes inmuebles (IBI), porque también tenemos el mínimo que permite la ley. Es la política del equipo de gobierno municipal: pagar lo mínimo por los impuestos", explica un portavoz del Ayuntamiento de Moralzarzal. Pese a todo, en el pueblo no hay coches subidos en las aceras ni empresas de alquiler de turismo por todos lados. En el bar La Paca, el dueño Francisco González, de 47 años, comenta: "La gente de Madrid que tiene una casa de verano aquí se empadrona e inscribe el coche. Hay empresas de alquiler de turismos pero están escondidas en los pisos. Establecen su sede social aquí pero no se ven los carteles", asegura Francisco González.

Muy cerca del bar de este hombre, junto al Centro de Salud, María García, de 31 años, departe junto a su amiga Ana María Sánchez, de 32, junto al coche de ésta. Las puertas están abiertas de par en par y en el interior tres niños con la cara pintada no dejan de moverse. "Si el coche es nuevo, en el pueblo hay un descuento en el pago del impuesto de matriculación de un 75% del impuesto municipal", precisa María. Ella tiene un Seat Córdoba por el que pagó 70 euros de impuestos, pero Ana sólo abonó 17,98 por su C8. Pocos en Moralzarzal saben cuando se puso la medida en marcha, pero son menos los que se lo preguntan. Interrogado sobre su opinión, Luis Arribas, un empresario de la construcción, resume el sentir general: "¿Qué te parecería a ti?", contesta. Pues eso.