El PP se queda solo en el Congreso en la votación para que se ilegalice EHAK
Los demás grupos acusan a los populares de dividir por propiciar debates sobre ETA
El Congreso no va a instar, de momento, al fiscal general del Estado para que ilegalice al Partido Comunista de las Tierras Vascas (EHAK en euskera). El PP lo pidió ayer a través de una proposición no de ley, que todos los grupos rechazaron. Se esgrimieron algunas razones de fondo, pero, sobre todo, se motivó el rechazo por considerar "un grave error" que "siembra la división" traer al debate público la política antiterrorista. El PP responsabilizó al Gobierno de que "ETA-Batasuna" puede estar de nuevo en las instituciones si se presenta a las elecciones municipales a través del EHAK.
Todo ocurrió según lo previsto. El PP defendió la primera de sus cinco proposiciones no de ley sobre política antiterrorista, y el resto de los grupos parlamentarios las rechazaron sin faltar al respeto del grupo proponente. Eso sí, los portavoces respondieron al diputado y responsable de Justicia e Interior del PP, Ignacio Astarloa, desde su escaño y sin consumir los cinco minutos que les permite esta figura parlamentaria.
El temor del PP a que se registrara un auténtico boicoteo a su iniciativa, expresado con un desaire como hubiera sido no responder, no ocurrió porque nunca fue esa la intención del resto de los grupos, según lo han expresado todos ellos. La decisión fue no entrar en el fondo de la cuestión, pero no dar la callada por respuesta.
Es más, ayer hubo algo más de lo esperado, dado que todos los portavoces, incluido el del PSOE, hicieron alguna incursión de fondo sobre por qué, a juicio de todos ellos, no hay elementos para ilegalizar a EHAK. Pero lo sustancial fue pedir al PP que retirara esa proposición, y que no volviera a plantear estos debates que producen "división entre los demócratas".
Elementos suficientes
El portavoz del PP, Ignacio Astarloa, consumió su tiempo para pedir al Gobierno, a través del Congreso como marca la Ley de Partidos, que inste a la fiscalía a la ilegalización del EHAK porque, dijo, hay elementos suficientes para ilegalizarla: "Un partido que ha adoptado en el Parlamento la vieja denominación de HB, Izquierda Abertzale; un partido que ha puesto una vez tras otra su representación en las instituciones al servicio de los fines de Batasuna-ETA; un partido que se ha negado siempre a condenar el terrorismo, aún después del horror de los asesinatos del pasado 30 de diciembre".
Ante esta argumentación de Astarloa, tanto el portavoz de Interior del PSOE, Antonio Hernando, como el coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, señalaron que todos los argumentos del PP terminan en 2005, fecha en la que EHAK se presentó a las elecciones, y desde entonces no existe ningún elemento nuevo que permita concluir que el EHAK tiene relación con la ilegalizada Batasuna. Además, añadieron, "no condenar el terrorismo no es motivo de ilegalización".
Pero Astarloa desgranó su discurso sobre las intenciones anunciadas por Batasuna de presentarse a las elecciones municipales, el próximo 27 de mayo, y advirtió al Gobierno que suya es la responsabilidad de "hacer cumplir la ley y evitar que ETA ridiculice a las instituciones y regrese masivamente a las mismas y a la financiación con nuestros impuestos".
Desde Tarragona el líder del PP, Mariano Rajoy, también participó en el debate de fondo, informa Oriol Aymí. Rajoy defendió la ilegalización de EHAK para evitar que Batasuna pueda usarlo como marca electoral en las municipales del próximo mes de mayo y usó como argumento que la formación abertzale no haya condenado el atentado de Barajas.
Tanto Hernando como Llamazares, así como Jordi Xuclà (CiU), Aitor Esteban (PNV), Uxúe Barkos (Nafarroa Bai) y Begoña Lasagabaster (EA) coincidieron en reprochar al PP que trajera "desunión" entre los demócratas con su afán de discutir la política antiterrorista, aunque cada cual esbozó sus argumentos. Así, todos los que se opusieron en su día a la Ley de Partidos, firmada por PP y PSOE, lo reiteraron.
También se recordó que el PP presentó esta y otras cuatro iniciativas en materia antiterrorista -contrarias también al sentir general del resto de los grupos- 26 días después del atentado de Barajas.
"Fue una pésima reacción porque fue unilateral y no favorece la unidad contra el terrorismo", dijo Hernando. "No ayuda y aporta tensión", dijo Aitor Esteban. "Les ruego que no vuelvan a traer más iniciativas así", señaló Xuclà. En principio, el PP tiene previsto defender sus otras proposiciones desde ahora y hasta la primavera.
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