Los enigmas de María Mariño
Aparecen dos obras inéditas de la escritora a la que se dedicará el Día das Letras
Con 50 años, María Mariño decidió que quería ser escritora. Fue en 1957. Sesenta años después, su obra sigue siendo una gran desconocida para la mayoría de los gallegos. Quizá por eso este año la Real Academia Galega decidió dedicarle el Día das Letras, por ser "una figura que aún hoy es preciso descubrir".
Para María Mariño, por su condición de mujer y por pertenecer a una clase social humilde, no fue fácil acceder a la cultura. Su primer libro, Palabra no tempo, no será publicado hasta 1963. Y todo gracias a Uxío Novoneyra, al que conocerá en O Courel y que será de gran ayuda para ella. En el prólogo, Ramón Otero Pedrayo habla de "la revelación de una intimidad impresionante del ego de la escritora con las cosas, de un desvelamiento y sentido trágico del ser del tiempo en la tierra".
Mariño morirá en 1967. Sólo tendrá tiempo de escribir cuatro obras. Dos de ellas permanecían hasta ahora inéditas. Pero Alvarellos Editora ha conseguido encontrar una de las dos, que verá la luz en el mes de abril. Se trata de Más allá del tiempo, un volumen escrito en castellano que la autora terminó en 1965, y en el que combina prosa y verso.
El manuscrito original, de 108 páginas, pertenece al periodista lucense Juan Soto, "gran amigo" del padre de Henrique Alvarellos, director de la editorial. Alvarellos cree que la aparición de esta obra inédita precipitará la de la otra que permanece perdida. Se trata de Los años pobres. Memoria de guerra y posguerra.
La editorial Alvarellos publicará Más allá del tiempo en su colección Rescate, acompañada de un estudio introductorio de la profesora de Literatura Galega en la Universitat de Barcelona Helena González.
Mariño fue una autora atípica. Apenas mantuvo relaciones con el resto de los intelectuales de la época, excepto con Uxío Novoneyra y Manuel María, con los que pasó largas temporadas en O Courel. También se relacionó allí con Ramón Piñeiro, Domingo García-Sabell o Sixto Seco, pero sólo con Novoneyra y María mantendrá una verdadera relación de amistad. Fue este rasgo suyo de permanecer tan ajena al mundillo literario el que probablemente la catapultó al olvido.
María Mariño padecía una depresión nerviosa, por eso se instala con su marido, Roberto Posse, en las sierras de O Courel, tras perder a su único hijo, al mes y medio de nacer. Allí vivirá toda su vida, con pequeñas escapadas a su Noia natal, a la villa de Monforte y algunas vacaciones, en los últimos años de su vida, en A Coruña.
Toda esta trayectoria vital marca sus obras. Sobre todo, su condición de mujer. Su poesía se inspira en la tradición popular, donde no es ajena del todo la sombra de Rosalía de Castro. Pero María Mariño comienza a escribir conn 50 años, por lo que consigue dotar a su obra de un poso de reflexión que sólo su madurez podía otorgarle. Según los escasos expertos en su obra, como Carme Blanco, María poseía una personalidad literaria que se situó en los márgenes de lo habitual en su tiempo.
Según Henrique Alvarellos, la obra Más allá del tiempo, ahora aparecida, va a despejar "todos los enigmas sobre María Mariño". El editor cree que es una pieza clave para comprender a la escritora, de la que hasta ahora se conocían dos libros de poemas, Palabra no tempo (1963) y Verba que comeza (1990, edición póstuma). Xerais reunió estos dos trabajos en una Obra completa en 1994.
Los dos poemarios están escritos en gallego y pasaron por el tamiz de un editor. Esto no ha sucedido en Más allá del tiempo, obra que permanece tal y como ella la escribió. Por eso puede, explica Alvarellos, "desvelar muchas incógnitas sobre su actitud como escritora". Una escritora subyugada por la belleza de O Courel (Alumea o souto a esperanza soia / a que onte viveu na súa sombra amiga / espera hoxe o que dela quedou fóra) y consciente de su realidad vital (Os cantores esquecen o seu día / e dóense do que saben que lles chega).
Se da además otra circunstancia importante: el idioma. Más allá del tiempo está escrita en castellano. De hecho, las dos obras de narrativa de Mariño lo están, escribiendo en gallego la poesía. Quizá esta realidad reavive una cierta discusión interna que se suscitó en la Real Academia Galega por su elección para el Día das Letras de 2007 debido a la escasa obra escrita en gallego de la poetisa noiesa.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.