Un organización de jóvenes vascos elude condenar el atentado de la T-4

Representantes de un organismo compuesto por grupos juveniles vascos llamado Consejo de la Juventud de Euskal Herria, constituido en 2005 con participación de Segi, denunciaron ayer en la Cámara vasca la sentencia que declara terrorista a esa organización, pero se negaron a opinar sobre el atentado de Barajas, porque las víctimas no eran vascas.

El PP (que aseguró que ese Consejo está controlado por Segi) y el PSE trataron de impedir la intervención, pero el tripartito y EHAK permitieron a los dos jóvenes, Aitziber Pérez, y Alex Marañón, hablar ante la Comisión de Mujer y Juventud. La solicitud de comparecencia señalaba que el grupo está "muy preocupado" por la sentencia sobre Segi, pero Marañón y Pérez eludieron pronunciarse sobre la bomba de Barajas "porque ocurrió en Madrid y las víctimas no son vascas", según el primero.

El PP no asistió y reprochó que se hubiera dejado "hablar a Segi". Pérez fue detenida como integrante de ese grupo en 2002. En 2005 fue absuelta por falta de pruebas. EHAK, por su parte, culpó al PSOE de la sentencia sobre Segi, del fin del proceso de paz y de la situación del preso De Juana Chaos.