Londres está a 200 metros de Córdoba

Unos 200 metros. Eso es lo que separa a Córdoba de recibir vuelos procedentes de, por ejemplo, Londres. En esos 200 metros de la discordia, están la mayoría de las parcelas ilegales que el Ayuntamiento debería expropiar para que el aeródromo de la ciudad se pudiera ampliar y las compañías comerciales pudieran operar ahí. En verano de 2005, la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, y la alcaldesa de la ciudad, Rosa Aguilar, se comprometieron a ampliar el aeródromo. Fomento pagaría la obra. El Ayuntamiento pondría el suelo. Y Córdoba recibiría vuelos nacionales y algunos europeos.

Así que los técnicos de AENA (Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea) se pusieron a trabajar. Todo parecía que iba bien, hasta el mes de septiembre pasado, cuando AENA remitió al Consistorio el informe Posibilidades de Ampliación de la Pista de Vuelo del Aeropuerto de Córdoba. En este documento Fomento se compromete a ampliar la pista hasta los 2.050 metros de longitud. Los técnicos consideran necesario que el ancho de las instalaciones se duplique y pase de los 150 metros actuales a unos 350 metros.

65 millones de euros

El problema es que, con esa ampliación, se tendrían que eliminar, según AENA, 63 casas que se levantaron irregularmente. Además, deberían desaparecer tres naves industriales y "cuatro construcciones menores". El Ayuntamiento debe pagar las expropiaciones y eso no le gusta al equipo de Rosa Aguilar. Según el Consistorio, de las arcas municipales saldrían unos 65 millones de euros para quedarse con el suelo. Esto supondría que el Ayuntamiento casi pagaría un millón a cada propietario.

Cuando IU, que gobierna la ciudad, hizo sus cálculos propuso como alternativa que el ancho de la pista se quedara como está. Si no, que se construyera una nueva al Sur de la actual. El martes pasado, AENA rechazó las dos posibilidades. La primera, según el subdelegado del Gobierno, Jesús María Ruiz, porque las normas de aviación internacional no permiten un ancho menor. La segunda, porque supondría hacer un aeropuerto nuevo. Aguilar, entonces, ha propuesto la construcción de una nueva rodadura, pero esta vez al Norte de las instalaciones.

Parece más que difícil que AENA acceda a la última petición del Ayuntamiento, la de la nueva pista al norte. Sobre todo, si se hace caso de lo que dijo ayer el subdelegado cuando se le preguntó sobre este asunto: "En el primer informe [el de septiembre de 2006] se estudiaron todas las posibilidades". Pero los técnicos de AENA se desplazaron ayer a Córdoba para analizar la nueva propuesta. La respuesta será inminente. El subdelegado dijo ayer que ahora sólo queda "saber si el Ayuntamiento va cumplir la palabra dada" y va a aportar el suelo necesario para la ampliación.

Y aquí llega la siguiente entrega del serial. ¿A qué compromiso llegaron Álvarez y Aguilar en verano de 2005? Según el subdelegado, "el compromiso no es otro que el de que el Ayuntamiento debe aportar el suelo necesario". IU, sin embargo, matizó ayer: " implicaba mantener el ancho actual y ampliar el largo de la pista", sostuvo el primer teniente de alcalde, Andrés Ocaña. Si el Ayuntamiento sólo aporta los suelos del nuevo largo de la pista, ¿quién pagaría las expropiaciones de los 200 metros más de ancho del aeropuerto? Según Ocaña, podría ser AENA, como lo está haciendo en otros aeródromos que se están adaptando a la normativa internacional.