La AUGC anuncia una respuesta "contundente" si hay sanciones

La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), convocante de la manifestación del sábado pasado en Madrid, ha anunciado que si se sanciona a los asistentes a la concentración "habrá una respuesta", que se traducirá en nuevas movilizaciones, de nuevo de uniforme. "Habrá movilizaciones tanto si hay sanciones como si el Gobierno no cumple sus promesas", aseguró ayer el secretario general de la entidad, Joan Miquel Perpigná. La AUGC marcará la estrategia a seguir este mismo sábado, durante la asamblea general que celebrará en Madrid. Fuentes del Sindicato Unificado de Policía (SUP), que apoyó la protesta de Madrid, está dispuesta a movilizarse en el caso de que recaigan sanciones sobre los guardias.

La AUGC tiene claro que actuará "de forma contundente" en el caso que se sancione "a los de abajo"; es decir, a los agentes uniformados que acudieron a la manifestación pero no subieron al escenario. En el caso de que los expedientes se abran a los convocantes, a los oradores del cuerpo (tres) o a la treintena de agentes que permanecieron en el escenario, la postura sería más suave, según la asociación.

Perpigná explicó que el debate ahora no es si habrá sanción o no, sino si el Gobierno cumple sus promesas electorales, entre la que no está, admite, la desmilitarización del instituto armado, algo que también se reclamó en la Plaza Mayor.

La asociación, que aspira a convertirse en un sindicato, ha recibido ya el apoyo de la Unión de Oficiales de la Guardia Civil, que inicialmente calificó la protesta de "inoportuna", pese a que considera las reivindicaciones de derechos para los agentes "justas y valientes". "Abrir expedientes a los guardias civiles que se concentraron en Madrid sería un gravísimo error, de consecuencias imprevisibles", asegura esta asociación.

Promesas socialistas

Fuentes del PSOE y del Gobierno aseguran que se van a cumplir los compromisos electorales. Así, recuerdan que el Gobierno ya ha elaborado el anteproyecto de ley de Régimen Disciplinario, que elimina el castigo de arresto en las misiones policiales de la Guardia Civil, y que en breve se presentará el catálogo de derechos y deberes. Pero la AUGC cree que no dará tiempo a que se aprueben de aquí a que concluya la legislatura.

El ministro de Defensa, José Antonio Alonso, por su parte, corrigió ayer sus declaraciones del día anterior de que los guardias civiles no habían cometido ninguna ilegalidad, al entender que hubo una mala interpretación. Ayer explicó que lo que hicieron los agentes "no se puede hacer". Alonso, que mantuvo excelentes relaciones con la AUGC durante su etapa como ministro del Interior, añadió: "Yo voy a estar a la determinación de los hechos que fije la Dirección General de la Guardia Civil, porque sé que hubo una concentración, que no se puede hacer, pero lo que no sé es quiénes fueron los sujetos, si son guardias civiles o no, qué dijo uno, qué dijo otro".