Una sentencia prohíbe a Cementos Cosmos la quema de neumáticos

La empresa Cementos Cosmos, ubicada en Oural, en el municipio lucense de Sarria, tendrá que poner fin la próxima semana a la quema de neumáticos, una práctica con la que obtiene energía alternativa desde hace cuatro años. Un fallo del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) anula la concesión municipal de la cementera para realizar esta labor, al estar ubicada a menos de 2.000 metros de un núcleo poblacional.

Los 125 empleados de Cosmos ya han expresado su preocupación por que la decisión del alto tribunal gallego pueda tener repercusiones negativas en su futuro laboral, un temor que comparte el alcalde sarriano, el independiente José Antonio García. El regidor anunció que la próxima semana ejecutará la anulación de la licencia, y el director de la planta cementera, perteneciente a la multinacional Cimpor, Jesús Martínez, confirmó que "en el mismo momento" en que se comunique que el permiso queda sin efecto, paralizarán la actividad.

Martínez está convencido de que la resolución del TSXG no tendrá un efecto a corto plazo sobre la plantilla, porque la importante demanda de cemento que existe hoy en día garantiza la continuidad de la actividad. Sí admite que el futuro puede estar "en entredicho" cuando decaiga esa demanda, algo que considera probable.

El alcalde intentará reunirse la semana que viene con responsables de la empresa y con los asesores del ente local para ver si existe alguna posibilidad legal de que la cementera retome la quema de neumáticos.

Un colectivo vecinal denunció el asunto ante los tribunales por el temor a que la contaminación provocada por la cementera se incrementara con la quema de las cubiertas. El director de la planta sostiene que se trata de una percepción "totalmente falsa". Sin embargo, la Audiencia Provincial de Lugo dio la razón a los vecinos en primera instancia, luego ratificada, de forma definitiva, por el Tribunal Superior.

Cementos Cosmos inició los estudios para la quema de neumáticos a través de una propuesta que les llegó, en 1995, desde la Consellería de Industria para evitar los problemas derivados de la acumulación de cubiertas de goma en contenedores.