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Fomento priorizará en Girona la conexión del AVE

La construcción del edificio de la estación de la alta velocidad en el centro de la ciudad de Girona no se realizará de manera simultánea a las obras de los túneles ferroviarios que cruzarán buena parte de la ciudad, según los planes provisionales que maneja el Ministerio de Fomento. El ministerio, que continúa manteniendo la fecha de febrero de 2009 para la llegada del AVE a Girona, dará prioridad a la conexión ferroviaria de la alta velocidad, mientras que la conexión de la línea convencional y la construcción de la estación urbana quedarán para la última fase del proyecto. Pese a ello, la alcaldesa de Girona, Anna Pagans, advirtió ayer: "No hay elementos que indiquen que estén pasando los trenes y debamos bajar a los andenes en ascensor".

Pagans aseguró que la construcción de la estación en el centro de la ciudad será la gran obra del siglo en Girona, por lo que el Ayuntamiento pretende ejercer un control estricto para que sea un buen proyecto. Pagans aseguró que la estación debe incluir la conexión con diversas calles de la ciudad e incluso la creación de alguna calle. En este sentido, el concejal de Urbanismo, Joan Pluma, explicó que el consistorio ha asistido ya a dos reuniones monográficas con técnicos del ministerio para buscar soluciones a los problemas que plantea la excavación de los túneles en cuanto a las conexiones de electricidad, agua, telefonía y gas.

Túnel de 2.300 metros

El trazado previsto, que comporta la excavación de diversos túneles realizados con el sistema de tuneladora, de una longitud de hasta 2.300 metros, plantea una gran complejidad para evitar que afecte a los servicios soterrados.

El Ayuntamiento de Girona presentó ayer la aprobación del expediente de información pública del estudio informativo complementario del tramo Vilobí d'Onyar-Sant Julià de Ramis, donde se apuntan algunas recomendaciones que deberán clarificarse en futuros documentos. En esa resolución se confirma que el trazado seleccionado es el de la alternativa 2, que incluye un desvío de la línea convencional soterrada para evitar el casco antiguo y, principalmente, la iglesia de Sant Feliu.

También se advierte de la necesidad de estudiar con detalle las posibles repercusiones en el sistema fluvial -los túneles deben sortear el Ter- y las aguas subterráneas. Respecto a la construcción de la estación, que ocupará el espacio de la actual de autobuses y en la que, bajo tierra, se situará el acceso al tren de alta velocidad, a la línea convencional y al servicio de autobús, el documento advierte de la necesidad de evitar que afecte al cercano Parc Central. El ministerio delega en el futuro proyecto de construcción el estudio específico de ruidos y vibraciones producidos por la línea en las zonas urbanas, el vertido de lodos y la valoración y definición de las expropiaciones e indemnizaciones de los bienes y derechos afectados.

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Fomento ha descartado definitivamente la petición de alargar los túneles al norte y al sur de la ciudad como defiende el Ayuntamiento. La opción del norte se descarta por motivos geológicos y la del sur porque, según Fomento, no existen razones medioambientales ni ferroviarias que justifiquen el soterramiento. La alcaldesa de Girona aseguró ayer que el consistorio continuará defendiendo sus criterios en las comisiones de seguimiento del proyecto, pero que descarta la vía del contencioso para defender sus alegaciones.

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