Álava y Vitoria homenajearon a sus 46 asesinados por ETA

"Perdón por el silencio, el olvido y el dolor que ello os ha infligido", pidió ayer la presidenta de las Juntas Generales alavesas, la socialista María Teresa Rodríguez Barahona, a los familiares de los 46 asesinados en Álava por ETA, durante el acto de homenaje a las víctimas y sus familiares, organizado por el Ayuntamiento de Vitoria y la Diputación. Entre ellos estuvieron los hijos de José Ignacio Ustaran, miembro de la UCD, y de Basilio Altuna, capitán de la policía nacional, asesinados en 1980, y Natividad Rodríguez, la viuda del dirigente socialista y ex vicelehendakari, Fernando Buesa, muerto junto a su escolta, Jorge Díez, veinte años después.

Representantes institucionales y familiares subrayaron la inocencia de las víctimas y reclamaron justicia y una paz que respete su memoria y sin concesiones "a hurtadillas", en palabras de Ustaran. El hijo de Basilio Altuna, Ángel, aludió en especial a las 46 mujeres que perdieron a sus maridos y pese a ello educaron a sus hijos en valores de "respeto y tolerancia". Nati Rodríguez deseó que algún día incluso la izquierda abertzale reconozca a las víctimas. El alcalde de Vitoria, Alfonso Alonso, y el diputado general, Ramón Rabanera, entregaron un recuerdo a los familiares.