La Junta hará un estudio para facilitar la entrada de empresas en China

La acelerada incorporación de China a los mercados va a cambiar el equilibrio económico internacional. Es una predicción de académicos, empresarios y políticos que avalan sus tasas de crecimiento. Compañías andaluzas como Isofoton, Tino Stone y, sobre todo, Abengoa, ya se han instalado allí. El consejero de Innovación, Francisco Vallejo, tras concluir esta semana una visita institucional al país asiático, apuntó que se aprovechará esa experiencia en la elaboración de una "metodología" que allane el camino a otras empresas andaluzas.

"Aquí las empresas andaluzas tienen que estar y pueden estar", aseguró el consejero de Innovación en conversación telefónica el pasado viernes desde Pekín, la última parada de su visita a China. Desde que, en 2002, la Junta abriese su primera oficina de promoción de negocios en la capital china, la Administración autonómica ha organizado varias visitas y encuentros para facilitar contactos a las empresas andaluzas.

Las primeras líneas de negocio se orientaron al comercio y el turismo; no en vano, China es el mayor mercado del mundo, con 1.300 millones de habitantes, y una clase alta que ha multiplicado su poder adquisitivo. Las dimensiones de la economía asiática apabullan. "En Sanghai se van a construir 400 kilómetros de metro y 270 estaciones", indicó Vallejo a modo de ejemplo. Esta ciudad china alberga uno de los mayores parques tecnológicos del mundo, con una superficie que multiplica por 12 la del Parque Tecnológico de Andalucía (PTA) de Málaga. Una comparación que pronto se quedará antigua, pues las autoridades chinas impulsan un nuevo y gigantesco recinto empresarial.

El objetivo del viaje era explorar las posibilidades de que la colaboración se amplíe a empresas de base tecnológica. La primera piedra de esta iniciativa se puso hace un año, con la organización en el PTA del primer primer foro hispano-chino de empresas, al que acudieron 143 firmas del país asiático. El parque malagueño, cuyo presidente, Felipe Romera, ha formado parte de la reducida delegación andaluza (también ha estado presente la Cámara de Comercio de Málaga), ha sido uno de los protagonistas de la visita.

El viernes, Vallejo ofició en Pekín de testigo en la firma de un acuerdo entre Telvent (filial de Abengoa) y la empresa japonesa Marubeni para establecer un centro de desarrollo de tecnologías relacionadas con la seguridad electrónica (software para la verificación de documentos). En el arranque de la visita, el pasado lunes, el consejero se reunió con responsables de Huawei, el líder chino en la fabricación de equipos de telecomunicaciones. La empresa quiere instalar un centro de I+D en Europa y Málaga es uno de los emplazamientos que Huawei estudia. La decisión aún no está tomada, pero el consejero apunta a la presencia en el PTA de Cetecom (una referencia mundial en la homologación de sistemas de telecomunicaciones) y la reciente alianza de Telefónica con Huawei como bazas favorables. Para ambos proyectos, Vallejo comprometió respaldo financiero de la Junta.

A la notable actividad en China de Telvent (control del tráfico en autopistas y metro) y Befesa (desaladoras, otra filial de Abengoa) se suman iniciativas que dan ya sus primeros pasos. La delegación andaluza visitó las nuevas fábricas de Tino Stone (diseño de piedra natural) e Isofoton (placas solares fotovoltaicas), que se inaugurarán en los primeros meses de 2007, aprovechando la celebración del año de España en China.

"Hay áreas en las que las empresas andaluzas parten de una buena posición, como las energías alternativas o la tecnología sanitaria", señaló Vallejo, quien indicó que el peculiar modelo económico chino, con una elevada influencia del Estado, y las diferencias culturales obligan a una apuesta empresarial "tenaz y paciente, con inicios muy lentos". De ahí que la consejería haya decidido elaborar un protocolo de actuaciones para que los nuevos proyectos andaluces no se enreden en esas barreras administrativas y culturales.