Medio Ambiente limita a 168 horas la iluminación navideña en las calles

El Departamento de Medio Ambiente ha lanzado una campaña destinada a contener la iluminación excesiva que se produce durante las fiestas navideñas. Para ello, ha enviado un oficio a los ayuntamientos en el que les recuerda que la normativa vigente limita a un máximo de 168 horas la iluminación de las calles, y eso teniendo en cuenta la excepcionalidad de las jornadas, amparada por la tradición.

Cataluña tiene una serie de normas cuyo objetivo es controlar el exceso de iluminación, es decir, la "contaminación lumínica". No obstante, la propia normativa tiene en cuenta la excepcionalidad de las fechas navideñas y admite un incremento luminoso en las calles desde hoy hasta el día después de la festividad de Reyes (el 6 de enero).

La norma dice que, excepcionalmente, puede aumentarse la iluminación callejera, pero establece un límite de 168 horas. El Departamento de Medio Ambiente, cuyo titular es el ecosocialista Francesc Baltasar, ha recordado a los municipios la obligatoriedad de limitar las luces a un determinado tiempo, según establece el decreto 82/2005.

Las iluminaciones ornamentales, insiste la nota remitida a los municipios, además de ajustarse a un horario regulado, deben tener sistemas de eficacia energética, incluidas bombillas de bajo consumo.

El recordatorio emitido por Medio Ambiente coincide con el inicio de estas iluminaciones. El alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, acudirá hoy a la fiesta que da paso al encendido de estas luces. El acto será en la plaza de Antonio Maura, a las 19.00 horas.

El Ayuntamiento de Barcelona hace ya tiempo que tiene en cuenta la normativa del ahorro, aunque no es de obligado cumplimiento sino desde el pasado año. El uso de lámparas de bajo consumo se inicio en 2004. Este año, estos dispositivo supondrán el 12% del total de la iluminación navideña, a lo que habrá que añadir el uso de hilos luminosos de incandescencia, que alcanzan el 78% de la instalación.

Una nota emitida ayer por el Ayuntamiento de Barcelona sostiene que la introducción de los sistemas de ahorro ha supuesto una reducción del consumo del 13% en términos económicos, con un coste para las arcas municipales de 47.000 euros, y del 20% en el aspecto energético.

En Barcelona, el horario de la iluminación navideña se ceñirá de forma estricta a la limitación decretada por el Gobierno catalán. Se mantendrá durante 44 días, de 18.00 a 21.30 horas.

La iluminación estará instalada en un total de 342 calles de la ciudad, que equivalen a 60 kilómetros. Este año se recupera la iluminación en algunas avenidas que habían dejado de tenerla, por ejemplo la Rambla de Catalunya. Pese a todo, se iluminará un 10% menos de superficie que el pasado año.

Paralelamente, el municipio está montando un belén en la plaza de Sant Jaume, como es tradicional. Inicialmente está previsto inaugurar las figuras del pesebre el próximo 30 de noviembre.