"No perdonaremos que se vuelva a perder el tiempo"

El presidente de la patronal vallesana Cecot, Antoni Abad, ha sido hasta hace unos meses miembro de la ejecutiva de la patronal estatal CEOE. Desde la organización que preside, impulsa la actividad de los business angels (inversores que apuestan por nuevos negocios) para favorecer la creación y expansión de empresas.

Pregunta. ¿Cómo ve las elecciones?

Respuesta. Veo las elecciones del día 1 como cualquier proceso electoral importante y preocupante por el grado de participación. Pero, sobre todo, deseando que finalice pronto y que se vuelva a la normalidad en la gestión del día a día.

P. ¿Quién cree que ganará?

R. Eso no tengo manera de saberlo, probablemente las encuestas no se equivoquen, pero la cuestión importante es quién gobernará. No hay que ir más lejos de 2003 para saber de qué estoy hablando. En aquellas elecciones había un supuesto ganador, pero no fue éste quien gobernó. Por tanto, gane quien gane, lo que sí pedimos desde el sector empresarial es que tome decisiones y lidere el Gobierno.

P. ¿Quién le gustaría que ganase?

R. Quien tenga sentido patriótico, demuestre responsabilidad y promueva una gestión pública. En definitiva, como representante empresarial, pero también como ciudadano, quien lo pueda hacer mejor por el país. Pero debo decir que, desde el punto de vista de representante empresarial, pediríamos que el nuevo Gobierno estableciese un diálogo más directo y permanente con los agentes sociales con el fin de progresar económicamente y que tuviese una visión anticipada de las necesidades.

P. Si hubiese pactos poselectorales, ¿por cuál de ellos se inclinaría?

R. Pues por el pacto que diese más estabilidad. Reclamamos un gran pacto nacional previo a un pacto de gobierno. Los grandes temas de país requieren que los partidos trabajen de forma conjunta, buscando consenso. Hay tanto por hacer que los empresarios no perdonaremos que se vuelva a perder el tiempo. Lo que está claro es que necesitamos volver al camino de la estabilidad política e institucional, ya que el país ha pasado un tiempo de estancamiento que ha generado una clara pérdida de competitividad empresarial y social.

P. ¿Cuál sería la primera medida que tomaría si estuviese en el próximo Gobierno?

R. La creación de un órgano de trabajo con plenos poderes y dependiente del Departamento de Presidencia para implementar y revisar procesos de los diferentes departamentos y áreas de la Administración. Concretando, una reingeniería de todos los procesos de la Administración que permitiese una simplificación administrativa. En España se necesita el triple de tiempo para poner en marcha un negocio que en el resto de los países de la OCDE. Para el sector empresarial y para el conjunto de la sociedad, la eficiencia de la Administración debería ser un tema importante a tener en cuenta en el nuevo Gobierno.

P. ¿Cuáles son los dos principales problemas de Cataluña?

R. El sistema de financiación y el encaje de Cataluña en el conjunto de España. La financiación nos debería permitir más capacidad de acción y de desarrollo de políticas y competencias, así como más capacidad de ejecución y de incidencia directa en el territorio, y lo que reclamamos desde la Cecot es que la mejora que supone la nueva financiación sirva para tapar más las ineficiencias y lo que exigimos es que la gestión de nuestro dinero, el de todos los catalanes, se haga con eficacia y eficiencia.

P. ¿Y respecto a la convivencia con el resto de España?

R. Si corregimos los flujos de financiación entre Cataluña y España, la mayoría de los catalanes no tendremos ningún tipo de problema de convivencia dentro de España. Pero, claro, el tema de la financiación requiere una corrección inmediata. Aquí la política debería buscar el bien común e informar a la gente. Porque durante los últimos años de la mentira se ha hecho discurso, y esto no ha beneficiado en nada a Cataluña. Parece mentira que por excesos y equivocaciones de algunos políticos de aquí, más a veces la mala fe de algunos de allí, los criminalizados seamos todos los catalanes.

P. ¿Piensa ir a votar?

R. Sí, sin duda. Es un deber que tenemos como ciudadanos que vivimos en una sociedad democrática.