Los alcaldes de la UE piden más gasto social ante el aumento de inmigrantes

Una política común y fondos suficientes. Los alcaldes europeos, a través del comité director del Consejo de Municipios y Regiones de Europa que se ha reunido este fin de semana en Sevilla, consideran que la adopción de una política europea de inmigración resulta "esencial" para desarrollar medidas "eficaces" en el ámbito local. "Necesitamos una política común en toda Europa", planteó ayer el alcalde de Viena (Austria) y presidente del comité, Michael Häupl.

Además, los ayuntamientos reclaman que los estados garanticen la financiación necesaria para "gestionar la inmigración" y "proveer los servicios públicos necesarios, incluyendo la necesidad de la suficiente ayuda económica a corto plazo en aquellos casos de urgencia o rápida aparición", según se recoge en el texto de la Declaración de Sevilla presentada ayer a modo de conclusión del encuentro.

"La mejor manera de afrontar la inmigración es aumentar el gasto social para que ningún ciudadano pueda sentirse perjudicado por la prestación de servicios a inmigrados", manifestó el alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín. El incremento de dinero público que reclamó el regidor hispalense debe centrarse "sobre todo en zonas con más incidencia de emigrados". "Las políticas europeas sobre migración deberán evitar crear efectos negativos en los sistemas sociales y económicos de los países", plantean en la declaración. Por su parte, el presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), Heliodoro Gallego, indicó que los problemas de la inmigración "afectan a toda Europa y toda Europa tiene que afrontarlo y ser solidaria".

En la Declaración de Sevilla, los representantes municipales señalan que los gobiernos locales deben disponer de las competencias necesarias que les "permitan llevar a cabo sus tareas eficazmente en relación a la integración exitosa de inmigrantes".

El derecho al voto de los inmigrantes en las elecciones locales que ya se aplica en algunos países fue puesto como ejemplo de "excelente práctica" para favorecer la integración de los extranjeros en las sociedades europeas de acogida.