UGT acusa a ELA de pretender "reventar" todas las instituciones sociolaborales de la comunidad

El secretario general de UGT-Euskadi, Dámaso Casado, acusó ayer al sindicato nacionalista ELA, mayoritario en Euskadi, de querer "reventar" todas las instituciones sociolaborales vascas, al priorizar sus objetivos de "soberanismo e independencia" sobre los problemas de los trabajadores y la legalidad vigente. Casado pidió de nuevo al lehendakari que ponga en marcha el diálogo social, si bien tiene la impresión de que "no es su prioridad el tema sociolaboral".

El dirigente ugetista destacó en una rueda de prensa en Bilbao la crisis, "en algunos casos profunda", que atraviesan los organismos sociolaborales vascos: el Consejo de Relaciones Laborales (CRL), el Consejo Económico y Social (CES), Hobetuz y Osalan. La escasa actividad de estos tres últimos, a juicio de UGT, deriva de su sistema de votación, que incluye el derecho de veto que ELA emplea con el apoyo de LAB, lo que le permite bloquear su funcionamiento.

En el caso del CRL, donde no hay vetos, Casado considera que la central mayoritaria también ha desplegado una estrategia para "cargárselo" con excusas.

En todo caso, UGT espera que esta crisis "sea transitoria y no definitiva". La central hizo un llamamiento a los sindicatos nacionalistas para que "recapaciten" porque "cada uno tiene sus ideologías, pero para solucionar los problemas de los trabajadores hay que reunirse y hablar".

Casado también acusó al Gobierno de haber amparado en buena medida la estrategia de ELA, por lo que reclamó al lehendakari, Juan José Ibarretxe, con quien se reunió el martes, que deje de "mirar para otro lado ante los problemas sociolaborales que hay en Euskadi". Pidió así al Ejecutivo que cambie radicalmente sus propuestas en Hobetuz "para que no haya exclusión de sindicatos ni de empresarios", que nombre rápidamente a un nuevo presidente para el CRL y que desarrolle las competencias en seguridad y salud laboral en Osalan, todas las cuales se encuentran transferidas.