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Trabajo asegura que velará porque las madres en paro y baja maternal puedan recibir ofertas de empleo

Mónica Ceberio Belaza

El Ministerio de Trabajo aseguró ayer que se ha dado una instrucción clara al Instituto Nacional de Empleo (INEM) para que las madres en paro y con baja maternal no se vean discriminadas y no dejen de recibir ofertas de empleo, si así lo desean, mientras duran las 16 semanas de permiso. Afirman que, de hecho, así se está haciendo ya, y que en las oficinas de INEM se pregunta a las mujeres qué desean hacer en estos casos.

Estas declaraciones están relacionadas con una sentencia del Tribunal Constitucional que ha censurado al INEM por tratar, en 1997, como a los enfermos a una madre en paro mientras estaba disfrutando de la baja maternal. La mujer había comunicado su reciente maternidad a la Administración para cobrar esta prestación, más alta que la de desempleo, y el INEM había dejado de incluirla en los procesos de búsqueda de trabajo.

¿Qué está ocurriendo 10 años después? Las competencias en políticas activas de empleo han pasado a las comunidades autónomas, de forma que son ellas las que se encargan de buscar ofertas de trabajo a los desempleados. Pero es el Servicio Público de Empleo Estatal el que sigue gestionando las prestaciones por desempleo y maternidad. Por esta razón, entre la administración central y las autonómicas hay un enlace, una aplicación informática que permite que compartan información: desde mayo de 2005, el Sistema de Información de los Servicios Públicos de Empleo (SISPE).

En el caso de una mujer desempleada y embarazada, quien le lleva todo el proceso de búsqueda de trabajo es su servicio regional de empleo. Pero cuando da a luz y desea cobrar la prestación por maternidad, debe acudir al INEM a pedirla, y éste mete los datos en el SISPE. Con el programa anterior, el SILE (Sistema de Información Laboral de Empleo), la mujer quedaba de forma automática suspendida como solicitante de trabajo, por "incapacidad temporal". Y así aparecía ante su comunidad autónoma. Lo único que podía hacer, si se enteraba de lo que estaba pasando, era ir a su servicio regional de empleo a decir expresamente que quería seguir recibiendo ofertas de trabajo. Si así lo hacía, la comunidad le quitaba entonces la suspensión temporal y volvía a ser incluida como demandante de empleo. Con la puesta en marcha del SISPE el año pasado, según aseguran fuentes de Trabajo, los funcionarios pueden ya incluir en el sistema que la mujer desea seguir recibiendo ofertas durante la baja. Y afirmaron que modificarán cualquier cuestión que sea necesaria para hacer efectivo este derecho.

Portavoces de los sindicatos Comisiones Obreras y la Unión General de Trabajadores (UGT) piden a las administraciones que se pongan de acuerdo para solucionar este problema, que, según ha dispuesto el Tribunal Constitucional, vulnera derechos fundamentales de las madres desempleadas.

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Sobre la firma

Mónica Ceberio Belaza
Reportera y coordinadora de proyectos especiales. Ex directora adjunta de EL PAÍS. Especializada en temas sociales, contó en exclusiva los encuentros entre presos de ETA y sus víctimas. Premio Ortega y Gasset 2014 por 'En la calle, una historia de desahucios' y del Ministerio de Igualdad en 2009 por la serie sobre trata ‘La esclavitud invisible’.

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