Los consejos de El Monte y San Fernando aprueban la fusión con un respaldo unánime
La inversión para la nueva marca comercial y el cambio de oficinas ascenderá a 22 millones
La unión entre El Monte y Caja San Fernando está cada vez más cerca. Los consejos de administración de las dos cajas con sede en Sevilla aprobaron ayer el proyecto de fusión de ambas entidades. El acuerdo será sometido a votación de las asambleas generales el próximo 30 de noviembre y el objetivo es que la nueva caja empiece a funcionar en la primavera de 2007. Olvidada ya la guerra que se produjo en 2001 entre las dos entidades y la Junta de Andalucía, el nuevo proyecto de fusión fue aprobado por unanimidad, aunque los vocales del PP manifestaron sus reticencias con algunos aspectos. La inversión para el lanzamiento del nombre comercial de la futura caja, que todavía no está decidido, costará 22 millones de euros.
Probablemente no hay una fusión tan anunciada y esperada en el sector económico como el de las dos cajas de Sevilla, que en los últimos cinco años han visto cómo otros dos proyectos se han ido al garete.
El tercer proyecto va por el camino correcto y con el viento de cola ya que todos los vocales de los consejos de administración de las cajas dieron ayer el visto bueno a la unión.
No obstante, los representantes del PP mostraron sus reticencias en dos puntos: por su ausencia de la comisión de coordinación de la fusión y porque la representación de las Diputaciones de Sevilla y Huelva en la futura caja no se hará de forma proporcional al peso de cada grupo político en estas instituciones.
Tras la aprobación del proyecto de fusión en los consejos de administración, los presidentes de El Monte, Antonio Pulido, y Caja San Fernando, Luis Navarrete, se desplazaron a un lujoso hotel de Sevilla para explicar los datos esenciales de la unión. Los dos hablaron de momento "histórico" y destacaron que la entidad resultante de la fusión se situará en el noveno puesto en el ránking de las cajas españolas.
Una de las cuestiones que ha quedado abierta es el nombre comercial que tendrá la futura caja. Hasta la fecha no ha sido posible encontrar un nombre que guste a todos aunque son varios los nombres que se han manejado (Alcaja, Guadalcaja o Cajaluz).
La memoria con la justificación económica de la fusión, que fue entregada ayer a los vocales junto con el resto de documentación del proyecto, recoge que el lanzamiento de la nueva marca comercial supondrá un gasto de cinco millones de euros, que se dedicarán a la campaña de comunicación. Además, la memoria estima que el cambio de rótulos y mobiliario de todas las oficinas de la futura caja, para adaptarlas a la nueva marca comercial, tendrá un coste de unos 24.000 euros por sucursal. En total, la implantación de la nueva marca costará entre 22 y 23 millones de euros.
Otra de las cuestiones que no se ha resuelto hasta última hora es el peso de las diputaciones de Sevilla y Huelva, como entidades fundadoras de San Fernando y El Monte, respectivamente, tendrán en la futura caja. Finalmente, la Diputación de Sevilla tendrá 11 representantes en la Asamblea General, por 10 la de Huelva. En el consejo de administración, la Diputación de Sevilla tendrá dos vocales y la de Huelva, uno. Para compensar, la Diputación onubense será la que tenga representación en la Comisión de Control y en la Comisión Ejecutiva. Los estatutos de la nueva caja también blindan a Sevilla como sede de la entidad en caso de que se afronten nuevas fusiones.
En la rueda de prensa, Navarrete señaló que la futura caja tiene que contribuir "al desarrollo económico y social de Andalucía", mientras que Pulido subrayó que será una entidad "mayor y mejor".
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