Francia recupera su memoria colonial

El filme francés Indigènes, de Rachid Bouchareb, está protagonizado por Sami Bouajila, Jamel Debbouze, Roschdy Zem y Samy Naceri. Los nombres y apellidos traducen un inequívoco origen magrebí. Su estreno ha llevado al Gobierno francés a descongelar las pensiones de 80.000 antiguos combatientes, 27.000 de los cuales son inválidos de guerra. Son soldados de la II Guerra Mundial que sirvieron bajo la bandera francesa, aunque habían nacido en territorios del antiguo imperio colonial.

Algunos siguen teniendo la nacionalidad francesa, y sus hijos. Pero ellos, desde 1959 pasaron a ser argelinos, tunecinos, marroquíes, senegaleses... Fue ese año cuando el Gobierno francés congeló las pensiones de sus soldados extranjeros. No volvieron a aumentar desde entonces.

En 1940, el Ejército de la Francia metropolitana fue derrotado por los nazis. Más de 1.400.000 soldados fueron hechos prisioneros. En África y Asia, Francia conservaba otros 700.000 soldados. Hasta el 8 de noviembre de 1942 esas tropas no se incorporaron a las fuerzas de los aliados, y a partir de ese instante sirvieron para liberar Túnez, participaron en el desembarco en el sur de Italia y, sobre todo, en la batalla de Monte Cassino, para desembarcar luego en la Provenza francesa. Progresaron hasta Estrasburgo y, en su marcha hasta la frontera alemana, liberaron buena parte de Francia de la ocupación nazi. En todas esas operaciones intervinieron casi 400.000 hombres, de los cuales 235.000 eran magrebíes o del África negra. Indigènes habla de esa cara relativamente oculta de la historia. Por ejemplo, en 1945, el general Charles de Gaulle ordenó la salida del Ejército francés de 20.000 senegaleses.

Durante años, su participación en la resistencia francesa -como ocurrió en el caso de las fuerzas españolas republicanas- se minusvaloró. Lo mismo ocurrió con el desembarco en la Provenza, relegado respecto al de Normandía porque así convenía a la Francia blanca e imperial, al igual que a sus aliados.

El filme ha puesto en evidencia la diferencia de trato dada a los soldados franceses, según su lugar de nacimiento o el color de su piel. Tras ver Indigènes, el presidente Jacques Chirac, ha exigido que se igualen las pensiones de todos los veteranos de guerra. Será cosa hecha el 1 de enero 2007, pero la medida no tendrá carácter retroactivo. Se adopta cuando, por razones obvias, el número de beneficiarios va a reducirse un 10% cada año. El coste del aumento de las pensiones se cifra en 110 millones de euros.

El filme presenta bajo su mejor perfil a las tropas africanas, que lucharon valientemente y sufrieron muchísimas bajas. Pero olvida que no todo fue glorioso pues el pillaje y las violaciones solían acompañar su avance. En la película italiana La Ciociara (Dos Mujeres, fue su título en España) Vittorio de Sica se basó en la novela homónima de Alberto Moravia para mostrar estos abusos, en concreto la violación de una joven campesina encarnada por Sofía Loren. Los actores de Indigènes fueron premiados, colectivamente, en el último festival de cine de Cannes. Sofía Loren obtuvo en 1961 el Oscar a la mejor interpretación femenina por su papel La Ciociara.